Crean una batería resistente a los golpes, al fuego y al agua

Gracias al electrolito, la batería no se incendia ni explota.
Gracias al electrolito, la batería no se incendia ni explota.
JOHNS HOPKINS
Gracias al electrolito, la batería no se incendia ni explota.

¿Alguna vez has soñado con tener una batería que sea resistente a cualquier tipo de golpe o incluso al agua? Un grupo de investigadores ha desarrollado un nuevo modelo de batería que podría poner fin a los problemas más comunes de este tipo de pieza tecnológica.

Podemos encontrar las baterías de iones de litio dentro de dispositivos electrónicos recargables, como los móviles u ordenadores portátiles. A pesar de que estas baterías mantienen una buena carga y tienen una alta densidad de energía, no están expuestas a ciertos problemas que pueden significar defectos en los dispositivos.

Durante los últimos años, un grupo de investigadores del Laboratorio de Física Aplicada Johns Hopkins han estado desarrollando una batería de iones de litios que parece ser inmune a las averías y se puede mojar sin tener una interrupción de suministro eléctrico.

Esta innovación se dio a conocer en 2017 en colaboración con los investigadores de la Universidad de MaryLand. Sin embargo, a finales del año pasado, Johns Hopkins impulsó el proyecto para terminar de desarrollar sus nuevas características.

Pero ¿cuál es el secreto para crear una batería indestructible? El misterio se basa en el electrolito, un componente que separa los extremos positivos y negativos de una batería a través de reacciones químicas que produce energía. Además, esta batería de iones de litio se creó en el momento que Konstantinos Gerasopoulos, científico senior de APL, conectó un ánodo y un cátodo (carga negativa y positiva).

El producto es transparente, flexible, no es tóxico, se puede fabricar sin ningún problema y puede soportar cualquier tipo de maltrato. Durante las pruebas, el equipo de APL sumergió el dispositivo en agua salada, le prendió fugo y lo cortó con unas tijeras, sin embargo, siguió funcionando de manera normal durante 100 horas.

A pesar de todas las ventajas que ofrece la batería de iones de litios, aún quedan inconvenientes que resolver. El principal objetivo es aumentar el número de ciclos de carga, ya que la batería pierde eficiencia después del uso de 100 ciclos.

Asimismo, su flexibilidad y robustez pueden sugerir nuevos usos en el ámbito militar y científico para submarinos autónomos, drones y satélites.

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