Las Palmas

El Gobierno canario recomienda hidratarse y no realizar esfuerzos físicos al aire libre ante la calima

Calima del desierto del Sáhara sobre las Islas Canarias
DANIEL MUHS - Archivo

El polvo en suspensión, apunta, contribuye a resecar las vías respiratorias, pudiendo provocar en muchas ocasiones un agravamiento de afecciones o síntomas relacionados con enfermedades respiratorias, tales como el asma, personas con enfermedad obstructiva crónica (EPOC) que hacen que aumenten las visitas a los servicios de urgencias y los ingresos hospitalarios en algunos casos, según informó el Gobierno canario en nota de prensa.

Por ello, indica que la exposición a la calima puede producir molestias torácicas, tos, palpitaciones, fatiga o incremento a la susceptibilidad a infecciones respiratorias, al menos durante los cinco días posteriores al inicio del episodio.

Así, recomiendan a las personas sensibles a este tipo de episodios, tales como niños, ancianos y personas con enfermedades respiratorias o cardiovasculares crónicas, no salir a la calle y mantener cerradas puertas y ventanas de las casas; limpiar las superficies con polvo con paños húmedos; mantenerse en ambientes húmedos e hidratarse; no realizar ejercicios físicos en el exterior; o en caso de empeorar los síntomas respiratorios llamar al 112.