Trump ironiza sobre Greta Thunberg y su discurso en la Cumbre del Clima: "Parece una joven muy feliz"
- Cerca de 80 países se comprometen a acelerar la lucha climática en una cumbre marcada por la bronca de Greta.
- Duro discurso de Greta Thunberg: "Estamos ante una extinción y habláis de dinero... ¡Cómo os atrevéis!".
- Sánchez anuncia en la Cumbre Climática que España aportará 150 millones al Fondo Verde de la ONU.
- Inesperada visita de Trump como 'oyente' a la Cumbre del Clima: no intervino por estar "muy ocupado".
- La ONU abre la Cumbre del Clima con una llamada a la acción urgente: "Nos estamos quedando sin tiempo".
Mientras buena parte de los líderes mundiales tratan de alcanzar un compromiso que acelere la lucha contra el cambio climático en la cumbre de la ONU, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha preferido centrar sus esfuerzos en burlarse de la joven activista sueca Greta Thinberg y su discurso en el evento, con el que reprochó a la clase política su pasividad al respecto.
"Miráis a la gente joven en busca de esperanza, ¿cómo os atrevéis? Habéis robado mis sueños y mi infancia con vuestras palabras vacías", culpaba airada y emocionada Greta a los líderes políticos en el arranque de la Cumbre de Acción Climática de la ONU este lunes.
Ante este mensaje, Trump, cercano a las tesis negacionistas del cambio climático, compartió en su perfil de Twitter el discurso de la adolescente y tiró de ironía para mofarse de ella: "Parece una joven feliz agurdando con esperanza un brillante y maravilloso futuro. ¡Qué agradable verlo!".
En el vídeo compartido por el presidente estadounidense se escucha a la chica interpelar a los mandatarios mundiales y preguntarles cómo se atreven a "mirar hacia otro lado" o justificar "que están haciendo suficiente".
"Nos encontramos en el inicio de una extinción masiva y lo único de lo que podéis hablar es de dinero y cuentos de hadas de eterna bonanza económica", les reprochaba Greta al borde del llanto.
Por su parte, Trump acudió breve e inesperadamente a la cumbre, algo que algunos optimistas, como el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, interpretó como una señal positiva.