¿Por qué nos ponemos rojos cuando hacemos ejercicio?

Uno de los efectos más visibles del ejercicio físico, sobre todo en personas con un tono de piel claro, es el enrojecimiento de la misma, sobre todo en el rostro. Pero, ¿cuál es el motivo?

La revista Time ha contactado con algunos expertos para explicar los motivos de este proceso. Así, Edward Coyle, el director del Laboratorio de Rendimiento Humano del a Universidad de Texas en Austin, explica que "a medida que el cuerpo se calienta durante la actividad física, la temperatura corporal y de la piel aumenta". Para compensar este aumento, el organismo busca maneras de refrigerarlo. Así, se abren los poros y se suda. Pero además, se abren los vasos sanguíneos para que la sangre fluya mejor. De esta manera, la sangre fluye más cerca de la superficie de la piel.

Pero también hay un proceso químico. El doctor Garret FitzGerald, profesor en la Universidad de Pennsylvania, explica que el aumento del flujo sanguíneo provoca que las células de la piel liberen una sustancia que puede incluir un compuesto llamado prostglandina, que contribuye al enrojecimiento. Este fenómeno se produce también cuando nos avergonzamos.

En general, el enrojecimiento causado por el ejercicio físico no es peligroso. "Es sólo una combinación del tono de piel y la química", dice el doctor Adam Friedman, profesor de Dermatología en la George Washington University School of Medicine and Health Sciences. Aun así, para personas diagnosticadas con rosácea (una enfermedad común y crónica que se caracteriza con un enrojecimiento de piel de la cara), se recomienda el uso de antihistamínicos.