La Policía asegura que salvaron "muchas vidas" porque al autor le quedaba "mucha munición"
- Los noruegos recriminan a la Policía que tardara una hora en llegar a Utøya.
- La Policía llevo a cabo este domingo una redada en Oslo ante la sospecha de la existencia de un piso con explosivos.
- Hubo seis detenidos, que fueron puestos en libertad tras confirmarse que no tenían relación con el doble atentado.
- La sentencia máxima para el detenido por el doble atentado es de 21 años.
- El detenido usó la munición más dañina, prohibida hasta en las guerras.
- Así preparó Anders Behring los atentados.
- Recogió en un manifuiesto sus ideas y motivaciones para cometer los crímenes.
- Noruega vive atónita la tragedia nacional de un doble atentado con 76 muertos.
La Policía noruega ha defendido este domingo su intervención en la isla de Utøya, en la que fallecieron 68 personas tras una matanza perpetrada por un fundamentalista cristiano. Los agentes evitaron "muchas muertes" ya que al autor del atentado le quedaba "mucha munición" en el momento de ser detenido.
En rueda de prensa, un portavoz policial reconoció que recibieron el primer mensaje de alerta sobre el tiroteo a las 17.26 horas (15.26 GMT), pero que los primeros efectivos no llegaron a la isla hasta las 18.25 horas (16.25 GMT), ya que tuvieron primero que confirmar el aviso y luego conseguir una embarcación.
Las autoridades noruegas se defendían de las críticas de los medios de comunicación por su pasividad y tardanza mientras 600 jóvenes vivían el infierno de una masacre y al menos 68 perdían la vida por los disparos.
Sobre las medidas de seguridad en la isla, en la que solo había un guardia de seguridad de servicio (que falleció por los disparos), la Policía no ha querido pronunciarse.
La munición más dañina
El portavoz oficial ha explicado la redada llevada a cabo este domingo a mediodía al este de Oslo. Seis personas fueron arrestadas, aunque en el lapso de una hora fueron puestas en libertad, al descartar su implicación en el doble atentado.
El motivo de la redada, según han explicado, fue la sospecha de que el autor confeso, Anders Behring Breivik, poseía un inmueble con explosivos donde se ha desarrollado la operación, pero finalmente no se encontró nada.
Sobre la posibilidad de que existan más víctimas mortales, la Policía noruega ha aseverado que no existen más cuerpos en la isla, y que la lista de los fallecidos aún no está completa. Por esta razón, y hasta que no estén confirmadas todas las identidades, además de que se haya comunicado toda la información disponible a los familiares, dicha lista no se publicará.
Los representantes policiales han anunciado que desean "mantener un diálogo abierto" sobre el caso, pero que no revelarán detalles de este, ya que se considerán "pruebas" para el desarrollo de la investigación. En relación al manifiesto publicado por el autor de los atentados, las autoridades noruegas han rechazado pronunciarse sobre su contenido.
La Policía ha confirmado que la sentencia máxima que podría recibir Behring Breivik, el autor de la matanza , es de 21 años de prisión, aunque no detalló cuantos años cumplirá finalmente.
Sobre Behring, la Policía ha informado que el detenido está cooperando con ellos, y que por ahora no pueden desvelar más detalles de lo sucedido al tratarse de una investigación en curso: "Necesitamos repasar lo que nos está contando y verificarlo", ha asegurado dicho portavoz.
Dice que actuó en solitario
Behring confesó a la Policía ser el autor del doble atentado y asegura que actuó en solitario, aunque las fuerzas de seguridad no descartan que pudiera contar con un cómplice. "No estamos buscando a nadie más, aunque podría haber otras personas", aseguran desde la Policía noruega.
Varios medios de comunicación sugirieron, citando a testigos presenciales, que hubo al menos dos personas disparando en la isla en la que fallecieron 68 personas, la mayoría jóvenes de un campamento organizado por el partido del Gobierno.
En Noruega siguen saliendo informaciones que añaden datos sobre la frialdad del autor confeso, como el hecho de que utilizó la munición más dañina que existe, un tipo de balas que se desintegra tras impactar, destruyendo los tejidos. Están prohibidas en las guerras y se utilizan para la caza mayor.
"Esas balas más o menos explotaban dentro del cuerpo de las víctimas. Las heridas internas que tenían eran absolutamente terribles" y han complicado seriamente la tarea de los médicos noruegos que han asistido a los heridos, publica el diario noruego VG.
Está previsto que este lunes el detenido pase a disposición del juzgado de distrito de Oslo.