A menos de dos meses de su boda, Tamara Falcó ha vivido una de las peores pesadillas que una novia puede tener: quedarse sin vestido con el que ir al altar. Ayer, la firma Sophie et Voilà, encargada de diseñarlo, dio a conocer que rompían el contrato con Falcó por un incumplimiento del mismo por parte de la marquesa de Griñón.
"Sentimos un profundo respeto por la creación artística de otros compañeros y nuestra ética empresarial nos impide traspasar ciertos límites que pondrían en peligro la autoría original del diseño. Por eso, y por el respeto que nos merece la originalidad de los trabajos de otras marcas de alta costura, no podemos cumplir con determinadas exigencias de la Sra. Falcó, que desde el inicio de la relación hemos desaconsejado y negado a realizar por acercarse demasiado a diseños ajenos a nuestra firma", cuenta la marca a través de un comunicado.
Según Leticia Requejo, periodista de El programa de Ana Rosa, "hace unos días, las diseñadoras y Tamara Falcó tuvieron una nueva prueba de vestido y Tamara les propuso hacer un calco de un diseño francés que está expuesto en el Metropolitan Museum de Nueva York".
Este año, una de las grandes exposiciones que acoge el museo es Karl Lagerfeld: A Line of Beauty, temática de la Gala MET de este año y donde encontramos 150 piezas diseñadas por el alemán, entre los que podemos dar con varios vestidos de novia.
De entre todos los vestidos, una pieza de archivo del 2005 es el que se posiciona como la posible inspiración para el vestido de Tamara. Se trata de uno de los modelos icónicos de la colección de alta costura otoño/invierno 2005 de Chanel.
Este vestido repleto de camelias blancas (la flor favorita de Coco Chanel) es uno de los favoritos de la exposición. Su diseño tan señorial resulta espectacular a la vista y da una presencia que muy pocas prendas pueden dar. Sin embargo, nosotras lo descartamos al ser tan pesado y de manga larga, teniendo en cuenta que la boda es a principios de julio.
Otro de los diseños posibles es un vestido midi de la colección de alta costura primavera/verano 2019, una de las últimas que hizo Karl Lagerfeld. Su corte por encima de los tobillos y el escote palabra de honor le da un aire 'vintage', mientras que las flores de colores diseminadas por toda la prenda lo hacen muy llamativo y alegre.
De nuevo, desestimamos esta elección, y es que pese a que Tamara Falcó adora los estampados florales, este diseño con los hombros al aire no es adecuando para una boda por la iglesia. Además, los apliques de flores le quitan esa solemnidad que esperaríamos ver en el vestido de novia de la marquesa.
Finalmente, nos encontramos con uno que nos convence más, un diseño que encaja con las pistas que se han ido dando con el vestido que quería llevar Tamara. Se trata de un vestido en color marfil satinado, de corte francés, manga larga, escote cerrado evasé y dos capas que caen como si fuera una cola desde los hombros.
Ahora, queda la parte más difícil para Tamara Falcó: encontrar un nuevo vestido de novia. Con tan poco tiempo no se puede confeccionar uno desde cero, por lo que las opciones más plausibles es que escoja un diseño que le guste y modifiquen la prenda a su medida.
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