Desde 1992 se lleva celebrando en París el Baile de las Debutantes, uno de los acontecimientos más importantes en el que una selecta selección de 20 jóvenes princesas, aristócratas e hijas y nietas de artistas de entre 16 y 22 años, se presentan en la alta sociedad vestidas con los diseños más espectaculares de Valentino, Dior, Alexis Mabille o Chanel.
Esta costumbre nació en el siglo XVIII en Inglaterra y se conocía como "The Season" (la temporada). Se trata de una tradición que conocimos gracias a la serie de Los Bridgerton, donde las mujeres de la aristocracia se presentaban ante la alta sociedad para conseguir un marido y asegurarse de tener un matrimonio acorde a su categoría social.
En esta época, las debutantes acudían a todos los bailes de sociedad que ofrecían las diferentes familias, en los que se reunían los jóvenes con títulos y apellidos importantes. Esta tradición se siguió haciendo hasta 1953, cuando la princesa Margarita decidió abolirla. No fue hasta la década de los 90 que Ophélie Renouard, una ejecutiva de relaciones públicas, decidió resucitar esta práctica en París y lo bautizó como 'le Bal des Débutantes' (el baile de las debutantes).
En sus primeras ediciones de 1992 y 1993, Renouard no quería retomar esta idea y solo se centraba en un desfile de moda de alta costura con jóvenes de familias conocidas y poderosas. El primer baile se celebró en 1994 y tuvo una gran acogida. Su creadora asegura que, además de aristócratas e "hijas de", busca contar con jóvenes de otros estatus sociales que destaquen por su inteligencia y sus estudios.
Año tras año, han pasado por este evento tan importante (según la revista Forbes) mujeres como Lily Collins, Amina Martínez de Irujo, Ava Phillippe (hija de Reese Witherspoon), Cósima Ramírez (hija de Ágatha Ruiz de la Prada), Lady Kitty Spencer (sobrina de Lady Di), Tallulah y Scott Willis (hijas de Bruce Willis), Daniela Figo (hija del futbolista Luis Figo), Leah Isadora Behn (hija de la princesa Marta Luisa de Noruega), Victoria y Cristina Iglesias (hijas de Julio Iglesias) y Natasha Connery (nieta de Sean Connery), por poner algunos ejemplos.
La organizadora del baile selecciona e invita tanto a chicas que las grandes casas de alta costura parisinas visten para la ocasión, como a sus "cavaliers" (parejas de baile entre los que se han encontrado Ignacio de Borbón). Sin embargo, Renouard busca desmarcarse de esta imagen tan antigua y centrarse en la moda.
"La sociedad que representa el baile ya no existe, solo se contempla la opción chica acompañada por chico. Cambiar eso sería un paso adelante hacia la realidad social del siglo XXI", explicaba a Efe Marina Fernández, directora de comunicación de la Escuela Internacional de Protocolo.
En las últimas ediciones, Le Bal están intentando desvincularse de esta imagen, centrándose más en la moda, reivindicando el empoderamiento femenino e incorporando cada vez más nacionalidades entre sus participantes. "Ahora, con Facebook y otras redes sociales, las debutantes no necesitan hacer una presentación en sociedad. Le Bal es más bien el inolvidable momento de su debut en la alta costura y los medios de comunicación", señala la organización del evento en su página web.
Alta costura
La moda es uno de los pilares fundamentales de este evento, donde los diseñadores de alta costura prestan sus diseños a las participantes, por lo que nos podemos encontrar vestidos, tanto nuevos como de archivo, de Chanel, Dior, Ellie Saab, Valentino, Jean-Paul Gaultier, Givenchy, Giambattista Valli, Balmain o Zuhair Murad. Todos quieren vestir a estas jóvenes para que se sientan princesas por un día.
Una semana antes del baile de las debutantes, les toman las medidas a las participantes y les realizan las pruebas de maquillaje con sus recogidos para la ocasión. Durante una sesión de pruebas, están acompañadas por fotógrafos de la organización que luego publicarán el material poco a poco para ir dándonos pequeñas pinceladas de lo que nos esperará la gran noche.
Aunque ahora está más centrado en la moda, el Baile de las Debutantes no está exento de controversia, ya que muchas personas lo consideran un evento machista y desfasado al presentar solamente a las mujeres ante la alta sociedad, como si estuvieran a la venta.
Su última edición fue a finales de noviembre del 2022, en el majestuoso hotel Shagri-La, situado enfrente de la Torre Eiffel, donde se presentó en sociedad una nueva generación de la nueva aristocracia y fue tal su acogida, que parece que tendremos más ediciones durante los próximos años.
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