Alarma textil: encuentran sustancias tóxicas en prendas de Shein

Un informe de Greenpeace, liderado por Greenpeace Alemania, revela que "la marca de moda ultrarrápida Shein tiene un modelo de negocios basado en químicos peligrosos y destrucción ambiental". Greenpeace ha analizado las sustancias químicas en 47 productos Shein encontrando que siete de ellos (15%) contenían sustancias químicas peligrosas que superan los límites reglamentarios de la UE (Unión Europea), y cinco de estos productos superan los límites en un 100 % o más, mientras que según las pruebas un total de 15 de los los productos contienen sustancias químicas peligrosas en niveles preocupantes (32%).

Mujer.es se ha puesto en contacto con la agencia de comunicación de Shein en España para conocer su versión sobre el informe de Greenpeace, y esto es lo que nos ha trasladado

La versión de Shein 

"Shein se toma muy en serio la seguridad de los productos. Nuestros proveedores están obligados a cumplir con los controles y normas que hemos establecido, incluidas las listas de control de productos químicos y las normas que están alineadas con el Reglamento REACH de Europa, así como las directrices CPSIA, CPSA y CA65 de los Estados Unidos, entre otras regulaciones. Colaboramos estrechamente con terceras agencias internacionales de pruebas, como Intertek, SGS, BV y TUV, para realizar periódicamente pruebas que garanticen el cumplimiento de nuestras normas de seguridad de los productos por parte de los proveedores. En el último año, hemos realizado más de 300.000 pruebas de seguridad química con estas agencias". Aclaran desde Shein.

Y continúan: "Al tener conocimiento de cualquier reclamación sobre nuestros productos, retiramos inmediatamente el producto o productos de nuestras instalaciones como medida de precaución mientras realizamos nuestras investigaciones. Si se verifica el incumplimiento, no dudaremos en tomar las medidas de seguimiento adecuadas con el proveedor de dicho producto. También podemos confirmar, basándonos en la información disponible a través de la cuenta de redes sociales de Greenpeace, que hemos retirado inmediatamente los productos mencionados que están pendientes de investigación", explican desde Shein.

Duras críticas desde Greenpeace

Sin embargo, desde Greenpeace criticaron de forma contundente a la multinacional china. "Es difícil imaginar cómo podría empeorar la moda rápida, pero ya lo ha hecho. Shein, la marca china de moda online, lidera la moda ultrarrápida, un fenómeno que lleva al extremo el modelo de negocio de la moda rápida. Esta evolución de la moda rápida obliga a los proveedores a realizar entregas a una velocidad vertiginosa; los pedidos se ejecutan en China en un plazo de entre 3 y 7 días  y se entregan directamente a la clientela internacional en transporte aéreo. Es un modelo de negocio que depende de la explotación del medioambiente y de las personas, que se basa en no aplicar la legislación diseñada para proteger el medioambiente, la salud y seguridad del personal y la clientela, y que rutinariamente cruza la línea entre lo que es legal e ilegal", explican desde la ONG.

La industria de la moda es responsable de hasta un 10% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero e incumple sus propios compromisos sobre estas emisiones. Además, es una de las principales causas de la contaminación del agua mundial y más del 80% de los impactos medioambientales de su cadena de suministro tienen lugar en los países del sur global donde se fabrica la inmensa mayoría de la ropa. Las marcas internacionales objetivo de la campaña están limpiando sus cadenas de suministro para solucionar el enorme problema de la contaminación del agua por sustancias químicas peligrosas.

Shein

Sin embargo, según Greenpeace: "un halo de misterio rodea a los proveedores que producen los productos de Shein; poco se sabe de los miles de proveedores de corte y confección de Guangdong, China, que confeccionan pedidos 7 días a la semana, y aún menos de las fábricas que lavan y tiñen sus tejidos, que son las que más contribuyen a la huella de contaminación de Shein.

Greenpeace compró 42 artículos de las páginas web de Shein en Austria, Alemania, Italia, España y Suiza y 5 artículos de una tienda pop-up en Múnich (Alemania) y los envió al laboratorio independiente BUI para analizar su composición química.

De los 47 productos comprados, 7 superaban los valores límites reglamentarios de la UE para sustancias químicas peligrosas. Eso supone el 15% de los productos. Los 7 productos estaban fabricados total o parcialmente con materiales sintéticos basados en combustibles fósiles. 6 de estos 7 productos eran botas o zapatos.

"En 5 botas o zapatos se encontraron niveles muy altos de ftalatos, con más de 100 000 mg/kg (10%), cuando el reglamento REACH de la UE establece que debe ser menos de 1.000 mg/kg. Unas botas de nieve negras compradas en Suiza tenían el nivel más alto de ftalatos, con 685 000 mg/kg de DEHP (68%)", reza el informe de Greenpeace.

Y continua: "Se encontró formaldehído en el tutú de un vestido de niña, con 130 mg/kg en el tul púrpura, lo que supera los requisitos de REACH, y 40 mg/kg en un tirante verde y en el tul púrpura, por encima del límite de 30 mg/kg13 de la directiva sobre juguetes de la UE".

Estos son solo algunas de las conclusiones de un informe que analiza 47 prendas escogidas al azar.

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