Si por algo se conoce a Doja Cat -a demás de por su música-, es por los looks tan atrevidos que lleva tanto en el escenario como fuera de él. La artista siempre sorprende con los estilismos más excéntricos, haciendo que jamás pase desapercibida. Durante la Semana de la Alta Costura nos sorprendió con un estilismo inspirado en el infierno, con 30.000 cristales de Swarovski pegados a su cuerpo y, desde entonces, no ha bajado el listón.
Entre sus looks estrella podemos encontrar el disfraz hiperrealista de gato con el que deformó su rostro para la Gala MET del año pasado, aunque también se la conoce por sus conjuntos totalmente transparentes en los que el pudor ni está ni se le espera.
Doja nunca ha tenido ningún problema en mostrar su cuerpo al natural, aunque siempre lo había hecho burlando a la censura cubriendo su pecho con pezoneras o ropa interior del mismo color que su piel, de forma que fuera imperceptible y crease un 'efecto desnudo'.
Sin embargo, algo ha cambiado en esta alfombra roja de los Grammy, donde la artista se ha unido a Florence Pugh y se ha convertido en una abanderada del 'free the nipple', mostrando parte de sus pezones en el 'photocall' de la gala.
La rapera apareció con un look que unía el 'grandmacore' (estilo de abuela) con el vestido transparente más sexy de Fındıkoğlu, de organza en tonos beige, escote palabra de honor y cuerpo encorsetado, una de las grandes tendencias de la noche. No obstante, en la zona del pecho, sobresalía la parte de arriba de los pezones que nos hacía preguntarnos si de verdad ha sido un error de estilismo o un detalle completamente premeditado.
La respuesta puede estar en su look completo (dejando a un lado la gorra verde militar), en donde abundan los motivos religiosos. Tanto las joyas como su cuerpo repleto de nuevos tatuajes con catedrales, gárgolas, serpientes y vírgenes se contraponen con la sensualidad del diseño de la firma inglesa, creando una estampa disonante.
Dilara Findikoglu suele jugar con este concepto en sus colecciones, mezclando los vestidos de las damas de la corte francesa con la decadencia de los suburbios de París, las transparencias más sensuales en vestidos de diseños elegantes o bikinis de lana para su colección de otoño/invierno.
Sea como fuere, el look de Doja Cat se ha convertido en uno de los más discutidos y comentados de la alfombra roja de los Grammy en redes sociales, incluso la propia artista, aunque no se ha pronunciado, se ha visto obligada a censurar las imágenes para poder subirlas a su cuenta de Instagram.
GALERÍA | Los looks más locos de los Grammy
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