¿Qué beneficios me aporta un producto de limpieza específico para la zona genital, en lugar de un jabón 'normal y corriente'? Esta es una consulta muy habitual.
Mar Santamaría
- Responsable de Atención Farmacéutica de PromoFarma.
Debemos tener en cuenta que el pH de la zona vaginal y vulvar, durante la etapa fértil de las mujeres, es más ácido que en otras zonas del cuerpo (oscila entre 3,5 y 4,5). Este pH ácido favorece el equilibrio de la microbiota, las bacterias beneficiosas que habitan en esta área del cuerpo. Y nos protege frente al sobrecrecimiento de otras bacterias u hongos que causan infecciones. En concreto, las bacterias del género Lactobacillus producen ácido láctico, que a su vez acidifica el medio, contribuyendo así al mantenimiento de un pH óptimo y a la presencia de otras bacterias saludables o “amigas”.
Este es el primer requisito que debe cumplir un buen producto de limpieza íntima: que respete y ayude a mantener el pH y los microorganismos de la microbiota. Por tanto, su función principal es ofrecer el máximo confort.
Limpiadores con árbol de té, árnica o aloe vera
Algunos limpiadores contienen extractos naturales como el de árbol de té o árnica, con propiedades antisépticas naturales que no alteran la microbiota autóctona. También suelen tener ingredientes calmantes, como el aloe vera, muy útil si hay presencia de sequedad vulvo-vaginal o en un proceso infeccioso.
Los tensioactivos o sustancias limpiadoras de estos cosméticos suelen ser muy suaves y no irritantes, a diferencia de otros jabones corporales que suelen tener más detergencia. Otro tipo de ingredientes cada vez más habituales en estos productos son los que actúan como prebióticos. Es decir, como sustrato que cuidan y alimentan las bacterias beneficiosas de la zona.
¿Son adecuados para las zonas genitales masculinas?
Otra consulta frecuente es si los hombres pueden utilizar este tipo de limpiadores: la respuesta es que sí, sin ningún problema. También son adecuados para la zona genital masculina.
En las mujeres, es importante recordar que el lavado debe ser externo, sobre la zona de la vulva. La vagina, internamente, ya tiene sus propios mecanismos de limpieza. La aplicación de productos sanitarios o lavados a nivel interno solo tiene sentido en algunas situaciones y si lo prescribe el/la ginecólogo/a. Desaconsejo el uso de esponja, ya que puede ser irritante y un medio de cultivo ideal para los microorganismos ambientales. Un lavado suave con las manos resulta del todo óptimo.
Para la edad infantil, existen limpiadores específicos con fórmulas adaptadas y que ayudan en caso de irritación o molestias.
Productos para la menopausia
También contamos con productos de higiene para la peri y post-menopausa, que aportan un gran confort. Durante esta etapa hay cambios fisiológicos hormonales que pueden conllevar mayor sequedad vaginal, prurito externo o incomodidad, por lo que resulta indispensable tener un plus de cuidado.
Más allá de la higiene habitual, para cuidar la zona íntima es recomendable utilizar ropa interior transpirable (mejor de algodón) y cómoda, así como evitar un uso excesivo de salvaslips que puedan resultar irritantes. Las braguitas menstruales fabricadas con tejidos de calidad o las copas menstruales también son buenas opciones para evitar irritaciones durante la menstruación.
Como decíamos, a lo largo de la vida existen situaciones que pueden provocar mayor sequedad vulvar y vaginal: en determinados momentos del ciclo menstrual, pero también durante la menopausia, el posparto y la lactancia, tras una intervención quirúrgica, por el uso de anticonceptivos hormonales o a causa de otros tratamientos farmacológicos, quimioterapia o radioterapia. En estos momentos, además de realizar la limpieza habitual con el tipo de producto correcto, aconsejo aportar humectación mediante la aplicación de productos hidratantes, tanto para la zona externa, como de aplicación interna vaginal. En caso de dudas, conviene consultar con el/la ginecólogo/a.
Lubricantes para favorecer las relaciones sexuales
El uso de un lubricante está indicado para favorecer las relaciones sexuales con penetración y es un producto que da un confort complementario, pero suele tener unas características distintas de los hidratantes vulvo-vaginales que comentábamos (estos últimos tienen una mayor permanencia sobre la mucosa vaginal). También existen óvulos que restauran y ayudan a mantener el ambiente fisiológico vaginal. En este sentido, el asesoramiento de un profesional sanitario es muy oportuno.
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