La subida de los precios de los carburantes en los últimos años ha llevado a los conductores en España a buscar formas de ahorrar cada vez que llenan el depósito de gasolina. Aunque los precios no han vuelto a superar los 2 euros por litro, como ocurrió a finales del año pasado, el coste sigue siendo considerablemente más alto que hace unos años, cuando el litro costaba hasta menos de 1 euro.
Existe un truco que los gasolineros conocen y que puede ayudar a los conductores a obtener entre 10 y 15 litros adicionales de combustible al repostar. Aunque pueda parecer una cantidad pequeña, dependiendo del vehículo, esos litros extra pueden suponer unos 200 kilómetros más.
La clave está en sacar los gases que se acumulan en el tanque de gasolina. Todos los depósitos cuentan con una zona de expansión de gases que, si se vacía, permite introducir más combustible. Algunos coches, de hecho, disponen de un pequeño pulsador que actúa como purgador de gases a la entrada del depósito, lo que puede ser muy útil.
¿Cómo conseguir unos litros de gasolina 'extra'?
El proceso es sencillo y se puede hacer sin ayuda del gasolinero. Una vez que la manguera salta indicando que el depósito está lleno, hay que presionar el botón circular situado junto al conducto de entrada de combustible. Al hacerlo, se escuchará un leve sonido similar al de abrir un producto al vacío, señal de que los gases están saliendo.
Tras purgar los gases, se puede continuar llenando el depósito con más combustible, a pesar de que la manguera hubiera saltado previamente. Es importante cerrar bien el depósito al finalizar para evitar derrames en las primeras curvas, ya que estará al máximo de su capacidad.
Otras opciones para aprovechar mejor el combustible
Otra alternativa es repostar de manera lenta, ya que la espuma que se forma al entrar el combustible impide la entrada de más litros debido a la acumulación de burbujas y gases. Llenar el depósito más despacio reduce, precisamente, la formación de estos gases.
Además, evitar aceleraciones bruscas y frecuentes al conducir también ayuda a ahorrar combustible. Una conducción suave y eficiente permite optimizar el consumo y alargar la autonomía del vehículo.
Aunque llenar el depósito al máximo puede provocar derrames que manchen las ruedas o la carrocería, este truco para obtener litros adicionales de combustible es especialmente útil en viajes de larga distancia, donde esos kilómetros extra pueden marcar la diferencia. Para el día a día, eso sí, se recomienda llenar el depósito de manera habitual sin forzar su capacidad al límite para evitar posibles averías.
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