Conducir por una carretera por curvas puede ser un placer o una tortura, dependiendo de nuestra destreza al volante y de lo que nos guste ponernos a los mandos de un coche. De todas formas, independientemente del gusto por el volante, si no se sabe encarar una curva (sobre todo si es muy cerrada) adecuadamente, se puede correr el riesgo de perder la trazada e incluso de llegar a sufrir un susto con el coche.
Por eso, es importante saber cuáles son los pasos que hay que dar conforme nos acercamos a una curva y más aún si es en carretera y circulamos a mayor velocidad que por ejemplo en ciudad. Hay 7 gestos que, ejecutados de manera ordenada y en el tiempo perfecto, nos asegurarán una curva perfecta. El gerente de Física del Vehículo en SEAT, Ángel Suárez, nos explica cuáles son:
- Cuando se acerca. La anticipación es básica, por eso es preciso mirar al frente, lo más lejos posible, para poder adaptarnos al trazado.
- La señalización es clave. Los paneles nos indican el sentido de la curva y cuánto tenemos que reducir la marcha respecto a la velocidad de la vía. Un panel obliga a desacelerar entre 15 y 30 km/h, dos entre 30 y 45 km/h y tres, más de 45 km/h.
- Antes del giro. Si se debe frenar o reducir la marcha, el momento de hacerlo es antes de entrar en la curva.
- Una curva, múltiples circunstancias. La velocidad y el frenado deben adaptarse a las condiciones de cada momento. Una curva no será igual en un día soleado que con lluvia o hielo. Tampoco con niebla o de noche.
- La trazada más efectiva. Para minimizar al máximo el giro es importante aprovechar bien el espacio del carril, ciñéndonos al exterior de la curva para dibujar la línea más amplia posible. A medida que el vehículo vaya adentrándose en la curva, el conductor tiene que ir acomodándose cerca del extremo interno.
- Control al volante. Las manos deben estar siempre correctamente colocadas en el volante a las 10:10, siguiendo la analogía de las agujas del reloj. Es clave girar el de forma progresiva, sin movimientos bruscos, manteniendo una velocidad constante.
- Aceleración de salida. Una vez finalizado el giro, cuando las ruedas vuelvan a estar rectas, acelerar nos ayudará a salir con la máxima estabilidad y prepararnos para el siguiente giro.
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