Las Navidades del 2023 ya son agua pasada y el 2024 ya es una realidad. Con el nuevo año también ha llegado otra cuesta de enero, una época en la que los excesos pasan factura y el ahorro se hace más imprescindible que nunca. Cualquier ámbito es bueno para recortar en gastos, y repostar combustible es uno de ellos. Lo cierto es que tanto la gasolina como el diésel alcanzaban sus precios más bajos en España antes de Nochebuena, pero tras Las Campanadas vuelve a estar otra vez al alza.
Por ello, cuanto más combustible se ahorre este mes, más lo notará el bolsillo, así que es muy importante seguir una serie de trucos para evitar tener que gastar unos euros de más. Con estos pequeños consejos, se puede ahorrar mucho carburante a lo largo de este mes, lo que repercutirá directamente en la economía doméstica de cada propietario.
Conducir de manera eficiente y hacer el mantenimiento
Lo primero que se debe hacer si se quiere ahorrar carburante es conducir de una manera totalmente eficiente para evitar un consumo innecesario de diésel o gasolina. Si se excede el límite de velocidad, se frena de manera muy brusca o se hacen maniobras muy exageradas, se gastará más combustible del necesario, y ni repostando en gasolineras baratas se compensará el gasto. Además, si se realiza el correcto mantenimiento del vehículo, ya no solo se evitará tener gastos imprevistos, sino que se consume mucho más si algún elemento no funciona correctamente.
Realiza viajes más cortos y sin tanto equipaje
Durante las Navidades es extremadamente común que se realicen trayectos muy largos por las carreteras españolas para reencontrarse con la familia y amigos. Además, se suelen pasar varios días lejos de casa, por lo que lo habitual es llevar más equipaje de lo normal. Tanto esos duraderos viajes como el exceso de maletas hace que el coche consuma más combustible de lo normal, por lo que si no es imprescindible, se debe recorrer la menor distancia con el menos peso posible.
Salir con tiempo y así evitar infracciones
Las prisas nunca han sido buenas compañeras de viaje, y tampoco lo son para el ahorro de gasolina. Si se sale de casa con el tiempo justo, habrá que conducir mucho más rápido por la carretera, lo que a su vez aumenta el consumo de carburante exponencialmente. Además, se puede exceder fácilmente el límite de velocidad establecido, y aunque haya contadas excepciones en las que se puede salir indemne, lo más habitual es que el propietario sea cazado por algún radar. Y una multa, en enero, no viene nada bien para el bolsillo.
No pasarse con la calefacción
A pesar de que haya trucos para calentar el habitáculo, la calefacción se convierte en uno de los elementos más vitales del coche en estos meses invernales. Debido al frío, los conductores tienden a encender la calefacción con una temperatura muy alta para calentarse antes, aunque eso es muy perjudicial si se quiere ahorrar combustible, ya que el motor también deberá entregar más energía al sistema de climatización. Además, el aire caliente sube hacia arriba, por lo que lo mejor es colocar las rejillas hacia abajo para que el coche entre en calor más rápido.
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