Conducimos el renovado Volkswagen ID.3: mejores materiales y más equipado de serie

En 2020 se lanzó al mercado el Volkswagen ID.3, un modelo que llegaba para romper moldes en la marca y hacer de guía en el camino hacia la electrificación, pues estrenaba la plataforma MEB del grupo. Tres años después, la firma alemana presenta ahora novedades en su ID.3, pues lo ha actualizado para continuar cosechando éxitos con él a nivel europeo, pero, también, haciendo caso a las críticas o sugerencias de mejora que tanto los clientes como la propia prensa, hemos ido haciendo a lo largo de estos tres años que lleva en el mercado.

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De este modo, renovado ID.3, con unas medidas de 4,26 metros de largo, 1,81 de ancho y 1,56 de alto, mantiene la estética prácticamente inalterada, aunque sí tenemos un nuevo paragolpes delantero de corte más deportivo, con entradas de aire laterales que mejoran el flujo aerodinámico alrededor de las ruedas, un capó de nuevo diseño con nervios marcados en él y que prescinde de la pieza plástica en color negro que estaba pegada al parabrisas, haciendo así que parezca más largo; dos nuevos colores: Verde Oliva y Azul Costa; y una zaga en la que las luces están ahora iluminadas por completo, incluida la pequeña parte que se encuentra en el portón del maletero, que antes era únicamente reflectante.

El interior, donde más se nota el paso al frente

Pero los cambios más significativos vienen en el interior, donde Volskwagen ha querido aumentar la calidad de los materiales y los ajustes. Así, el salpicadero es ahora de un material más blando y con mejores terminaciones, mismo principio que siguen las puertas, que tienen además una doble costura en contraste en ellas. Todo esto se ha conseguido además utilizando materiales sostenibles, como la microfibra Artvelours Eco que encontramos en los asientos, compuesta en un 71% de material reciclado. Asimismo, entre las salidas de aire centrales tenemos ahora una insignia ‘ID.3’.

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También suma más tecnología al interior del habitáculo, y mucha de ella de serie. Por ejemplo, la pantalla central que antes era de 10 pulgadas, ahora es de 12 y de serie en toda la gama. Tras el volante también encontramos un cuadro de instrumentación digital de 5,3 pulgadas y un Head-Up Display que proyecta información en el parabrisas.

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En lo que respecta a su oferta, Volkswagen ofrece este ID.3 2024 en dos versiones: Pro y Pro S; ambas con tracción trasera y 204 CV de potencia. Como opción hay distintos paquetes de equipamiento Exterior, Interior, Asistentes y Confort, los tres primeros con la opción de una versión Plus más equipada. La variante Pro tiene una batería de 58 kWh útiles que hace que sea capaz de recorrer hasta 428 kilómetros en ciclo WLTP. El ID.3 Pro S recurre por su parte a una batería de 77 kWh y, por tanto, alcanza los 559 kilómetros; curiosamente algo menos que en el ID.3 anterior, mientras que el Pro, con batería más pequeña, gana 1 kilómetro de autonomía con respecto al modelo actual. A la hora de cargar las baterías, el Pro puede hacerlo con potencias de hasta 120 kW, mientras que el Pro S alcanza los 170 kW (antes se quedaba en 135 kW).

Lo probamos por Madrid

Nosotros hemos podido probarlo en un recorrido por Madrid y alrededores y lo cierto es que, en términos generales, conserva todas las virtudes que hacen del ID.3 una buena opción urbana: su maniobrabilidad y buen ángulo de giro, espacio interior, prestaciones, comodidad, etc. Quizá visualmente apenas se noten cambios y si no te lo dicen, pocos serán los que se percaten que es un modelo renovado. Sin embargo, los cambios en el interior sí son más que notorios, con una sensación de mayor calidad en todos los materiales que tocas, algo que eleva bastante la sensación de estar en un coche que cuesta lo que cuesta. Y es que estos ID.3 2024 parten de 31.430 euros para la versión Pro, aplicado ya el Plan Moves III con achatarramiento y la deducción del IRPF (sin esto son 42.740 euros) y 37.150 euros para el Pro S (48.630 euros sin Moves III).