La división N de Hyundai ha estado probando por el famoso y exigente circuito de Nürburgring el que será su primer modelo totalmente eléctrico de alto rendimiento: el Ioniq 5 N, que se presentará este mismo mes.
Este Ioniq 5 N mezcla la Plataforma Modular Global Electrificada de la firma con las tecnologías y la experiencia de su división N en los deportes de motor para alcanzar el máximo nivel prestacional del vehículo.
De este modo, Hyundai ha combinado los puntos fuertes del Centro de I+D de Namyang, situado en Corea del Sur, con su Centro Europeo de Pruebas en Nürburgring, que es una extensión del centro europeo de I+D que la marca tiene en Rüsselsheim, Alemania, mismo lugar donde los equipos europeos de diseño e ingeniería de Hyundai tienen su sede desde 2003.
Las dificultades de un eléctrico
Y es que la marca coreana lleva muchos años, a través de su división N, haciendo uso del circuito de Nürburgring Nordschleife para validad tecnologías de competición en sus vehículos. Ahora bien, extraer el máximo rendimiento de un vehículo eléctrico requiere otro enfoque diferente al que se tiene con los vehículos de combustión interna. La gestión de la refrigeración, por ejemplo, se ha cuidado especialmente en el Ioniq 5 N, ya que los eléctricos son más difíciles de refrigerar debido a todos los componentes eléctricos que funcionan a alto rendimiento. Para evitar esto, Hyundai añade un radiador eficiente específico del modelo, un motor refrigerador de aceite mejorado y un sistema de refrigeración líquida para la batería.
Otra de las novedades técnicas que traerá este Ioniq 5 N es el preacondicionamiento de la batería N, que coloca la temperatura de las celdas de la misma a su temperatura de mayor eficiencia energética dependiendo del uso que vaya a dársele. Esta función está dividida en dos modos: modo ‘Drag’ y modo ‘Track’. En el primero, la temperatura óptima se establece para el uso inmediato de la máxima potencia, mientras que en el modo ‘Track’, se baja la temperatura al máximo posible para aumentar el número de vueltas.
Por otro lado, y también novedoso, encontramos el N Race, que ofrece a los conductores un control más directo sobre el uso de la energía del coche, priorizando la conducción ‘sprint’ o ‘Endurance’. Sprint es el estado por defecto del coche, que prioriza la potencia máxima a demanda del conductor. Endurance, por su parte, es un ajuste que maximiza la autonomía del Ioniq 5 en circuito.
Cargado de tecnología para el disfrute
Ahora bien, como en todo buen deportivo, la potencia ha de estar acompañada de lo mismo en frenado. Hyundai ha dotado a este eléctrico de altas prestaciones de una frenada regenerativa de los motores que genera la fuerza de frenado primaria, mientras que los frenos hidráulicos convencionales, que han sido mejorados y son ahora de 400 milímetros y mejor refrigerados, proporcionan una fuerza adicional si es necesario. Los ingenieros de Hyundai N diseñaron este exclusivo sistema de frenado regenerativo especialmente para el Ioniq 5, ofreciendo hasta 0,6 G de fuerza de desaceleración únicamente valiéndose de la regeneración.
Pero si hay algo que llama la atención por novedoso y curioso en el Ioniq 5 N es el hecho de que contará con unos trucos para hacer que los conductores se sientan más conectados con el placer de la conducción deportiva de lo que normalmente lo hacen a bordo de un vehículo eléctrico. Esto se debe a que Hyundai ha desarrollado el N Active Sound + y el N e-Shift.
El primero consta de un sistema de 10 altavoces, ocho internos y dos externos, que ofrece tres temas de sonido diferentes: Ignition, Evolution y Supersonic. Ignition simula el motor 2.0 turbo de los coches de combustión interna de la división N de Hyundai, con efectos de sonido de petardeo del escape. Evolutión, por su parte, es un sonido electrónico inspirado en el N 2025 Vision Gran Turismo Concept. Por último, Supersonic simula un avión de combate.
Además de esto, el N e-Shift, que trabaja en estrecha colaboración el N Active Soundc+, simula la transmisión de doble embrague y ocho velocidades de los coches N de la marca, simulando un cambio de marcha, controlando la salida del par del motor y dando la sensación de sacudida que dan en el cambio los coches con caja de cambios en la actualidad.
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