En primer lugar, hay que señalar que las partículas que producen los neumáticos a la hora de circular también suponen una fuente de contaminación que se expulsa al medio ambiente, según se precisa desde varias investigaciones, como la que han llevado a cabo desde el Royal College of Art en conjunto con el Imperial College de Londres, fundando el grupo de investigación The Tyre Collective.
En concreto, en sus últimos estudios están trabajando para conseguir soluciones con las que minimizar el daño que producen las partículas de las gomas de los neumáticos que se crean cuando entran en contacto con el asfalto y que nos debe preocupar incluso más que los gases que emiten los tubos de escape.
¿Cómo funciona este sistema anticontaminación?
El último prototipo diseñado por los responsables de The Tyre Collective consiste en un dispositivo que se instala en la parte posterior de los neumáticos, a una cierta distancia, y que utiliza placas electroestáticas que atraen las partículas de caucho que desprenden las gomas, cabe mencionar que el sistema se carga por la fricción en la carretera.
Según los últimos resultados del estudio que están probando este último prototipo en dos furgonetas que circulan por Londres, el dispositivo solo ha sido capaza de recolectar un 20% de las partículas que expulsan los neumáticos.
¿Cuál es el nivel de contaminación de los neumáticos?
Desde la firma Emission Analytics, que tiene entre sus funciones la evaluación de la contaminación que generan los vehículos, señalaron, según sus últimos análisis, que los cuatro neumáticos de un coche generan de media 36 miligramos de partículas por cada kilómetro recorrido y que va a parar al medio ambiente.
Esta cifra supone alrededor de 2.000 veces más que la media que producen los tubos de escape, que se sitúa en los 0,02 mg/km. Asimismo, en caso de que se lleve a cabo una conducción brusca en la que predominan las frenadas fuertes y grandes aceleraciones, el nivel de contaminación de los neumáticos aumentará considerablemente.
¿Cuándo se considera un neumático desgastado?
Según precisa la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) “para saber si ha llegado el momento de cambiar los neumáticos, debes fijarte en el dibujo. En el rayado del dibujo hay unos tacos que marcan la profundidad mínima que es de 1,6 mm. Si estos llegan a la superficie, el neumático está demasiado gastado y es hora de cambiarlo”.
En caso de no sustituirlo y que un agente de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil nos pare, es posible que nos interponga una sanción por ello, además, que los riesgos en la conducción aumentan considerablemente.
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