Indra supera su primer obstáculo tras anunciar el programa de sucesión en la cúpula directiva. Dicho plan, que incluye el relevo de Ignacio Mataix como consejero delegado del grupo, ha obtenido un primer visto bueno de la banca de inversión. La tecnológica recibió hasta ocho revisiones positivas en la jornada de este martes (o consejos de compra o de mantener) y ninguna revisión a la baja del precio objetivo, lo que supone un espaldarazo a la intención del consejo de administración de cambiar de CEO por segunda vez en poco menos de un año.
Entre estas casas de análisis figuran Bestinver Securities, Alantra, Mirabaud Securities, GVC Gaesco o CaixaBank BPI que, en todos los casos, han optado por mantener el precio objetivo estipulado en la anterior revisión. Con todo ello, el consenso de 'Bloomberg' ve potencial a la acción para escalar a los 14 euros y además goza de altas recomendaciones de compra (60%), frente a solo un 10% que aconseja vender.
Destaca también el respaldo de Renta 4, que si bien valora como algo "negativo" esta decisión, ya que se suma a la oleada de salidas de los principales directivos de Indra desde la destitución de Fernando Abril-Martorell como presidente ejecutivo en mayo 2021, sobrepondera este valor y cree que puede llegar a cotizar por encima de los 15,4 euros.
Este apoyo se produce tras el desplome acusado en bolsa, donde se llegó a dejar más de 7% en la sesión del martes. La noticia generó dudas entre los inversores seis meses después de cerrar la última crisis de gobernanza, que acabó con la recomposición del consejo y un cambio accionarial que tiene al Estado, a través de la SEPI, como máximo accionista con un 28% de la compañía. De hecho, este desplome rompe la recuperación en bolsa que había comenzado Indra ante esta nueva etapa. Desde el pasado mes de octubre, cuando tuvo lugar la junta extraordinaria para designar a los seis nuevos consejeros, los títulos del grupo presidido por Marc Murtra han recuperado más de un 45% de su valor.
Indra atravesaba un momento dulce en bolsa antes del anuncio del relevo, logrando estrenar marzo en máximos de cinco años después de presentar los mejores resultados de su historia con un beneficio récord de 172 millones y elevar el dividendo un 67%, hasta los 0,25 euros por título. La última corrección le lleva a acumular una subida del 8% en lo que va de año en el Ibex.
La clave estará en los tiempos
El reto más urgente que afronta la compañía en el momento actual es el de encontrar un sustituto para Mataix. El consejo empleará un proceso similar al que utilizó para el nombramiento de los últimos seis componentes de este órgano y están abiertos a un fichaje externo. En la propuesta del candidato también influye los 'timings'. Aunque han evitado en todo momento marcar una fecha límite para tener sobre la mesa al menos un nombre, la temprana elección puede calmar las aguas entre los inversores, que ya están acostumbrados a los sustos que ha dado este valor al mercado durante los últimos años.
Tal y como ha publicado este medio, Indra confía en llegar a la celebración de la junta general estrenando nuevo CEO. De esta decisión dependerá buena parte de su rumbo en bolsa, al menos en el corto plazo, hasta que se conozca el trazado del nuevo plan estratégico, prioritario para el desarrollo de la industria de Defensa española en los próximos años. Otro de los puntos clave radica en si finalmente el grupo cederá a los deseos de Amber Capital, el fondo dirigido por Joseph Oughourlian, de resucitar el 'spin off' de Minsait, una escisión que contaba con el rechazo de Mataix.
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