Cada generación tiene sus series de cabecera, esas ficciones televisivas con las que creció y a las que mira con nostalgia y afecto pasados los años. Los millennial, sobre todo aquellos que entraban en la adolescencia a principios de los 2000, vivieron el 'boom' de los dramas de instituto. Popular, One Tree Hill y, por supuesto, The O.C. marcaron a toda una generación de jóvenes de todo el mundo.
En los últimos años, se han expuesto las polémicas detrás de todas estas apuestas, también The O.C. Recientemente, tras años alejada de los focos, Mischa Barton, que daba vida a Marissa en la serie, por fin rompía su silencio sobre lo ocurrido en la ficción y aseguraba que fueron el bullying y el entorno de trabajo los que provocaron su salida en la tercera temporada.
Al parecer, su trágica marcha empezó a fraguarse bastante pronto, con la adición de Rachel Bilson (Summer) a la ficción: "Sumaron a Rachel en el último momento, tras la primera temporada, como regular en la serie y con un salario igual al del resto. Y luego sufrí una especie de acoso por parte de los hombres en el set que fue una mierda".
La actriz también aseguró que se sintió "muy desprotegida" durante aquellos años de fama desmedida y que "trabajaba probablemente más horas" que el resto de actores: "Había gente en el set que fue muy cruel conmigo. No era el mejor ambiente para una chica joven y sensible que además había sido arrastrada al estrellato".
Ahora, Barton ha vuelto a referirse a sus años en The O.C. y ha confirmado que vivió un "complicado" romance detrás de las cámaras con su compañero Benjamin McKenzie, Ryan en la apuesta.
Mischa Barton sobre 'The O.C.' y su relación con Benjamin McKenzie
Mischa Barton ha sido la última invitada en el exitoso podcast de Alex Cooper Call Her Daddy, en el que ha repasado su vida y ha ahondado en las dificultades que sufrió al rodar un éxito como The O.C. siendo tan solo una adolescente. Asimismo, ha confirmado que tuvo una relación amorosa fuera de la pantalla con Benjamin McKenzie.
Barton, que empezó a trabajar en la ficción con tan solo 17 años, ha afirmado que el romance entre Marissa y Ryan "no solo pasaba en pantalla", pero ha reconocido que esta relación fue "complicada".
"Llegué a la serie virgen, siendo una niña realmente, sintiendo que tenía que crecer rápido", ha confesado la actriz en el podcast": "Actuar con gente más mayor que yo era como: 'Vaya, ellos saben lo que hacen'. E iba a haber relaciones en esta serie, iba a tener que interpretarlas y yo no me sentía preparada para ello, porque yo tardé en desarrollarme en la escuela y no había salido con nadie".
Debido a esto, la actriz cuenta que sintió que "no tenía ni idea de lo que hacía" y que "tenía que ponerme al día muchas veces". Asimismo, la diferencia de edad entre McKenzie, que arrancó la serie con 25 años, y ella hizo que el rodaje fuera "un poco complicado para todo el mundo": "Digamos que viví muchas de mis primeras veces. Y eso me separó del resto en cuanto a que no estaba viviendo por mi cuenta en Los Ángeles".
Este aspecto también afectó de forma negativa a su relación con McKenzie, que arrancó muy al principio. "Fue complicado que pasara desde el principio. Me sentí abrumada y no estaba lista para nada de eso", ha rememorado: "Recuerdo que decían: 'Mischa ha desaparecido con Ben y solo tiene 17 años y medio, 18'. Y los productores hablaron con mis padres. Fue un suplicio".
"Eso pasó muy al principio de la serie, antes de que llegáramos a mitad de temporada, así que estaban pasando muchas cosas", ha continuado explicando: "Esa serie, pasaron tantas cosas en tres temporadas que parece que duró siete años, pero no. Todo pasó en un espacio muy reducido de tiempo".
Barton también ha confesado que fue ella la que terminó la relación con McKenzie porque era "abrumadora y demasiado cercana al trabajo". Sin embargo, afirma que la química que compartían traspasó la pantalla, como en aquella escena en la que Ryan y Marissa se dan su primer beso en una noria en la primera temporada.
"La gente se enamoró de los personajes porque había una amistad y un amor genuino", ha explicado: "La tensión sexual estaba ahí y se nota, incluso cuando ves las escenas en la noria y demás... Creo que nos odiábamos en ese punto, pero todavía estaba esa tensión intensa entre nosotros y funcionaba para la serie".
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