Tres años después del triunfo de Mare of Easttown, considerada una de las mejores series de 2021, Kate Winslet ha vuelto a HBO Max con una nueva apuesta televisiva, The Regime, una sátira política en la que interpreta a una canciller y máxima gobernante de un régimen autoritario ficticio.
La actriz, que se encuentra en plena promoción de la producción, ha concedido una entrevista al New York Times en la que se ha referido a las escenas de sexo que ha tenido que rodar a lo largo de su carrera y la importancia de contar en la actualidad con coordinadores de intimidad en este tipo de secuencias.
La británica ha admitido que, en sus trabajos anteriores, habría agradecido tener su lado a este profesional a la hora de encarar escenas íntimas delante de la cámara o desnudos frontales. "Me habría beneficiado de un coordinador de intimidad cada vez que tuve que hacer una escena de amor, estar parcialmente desnuda o incluso dar un beso", ha asegurado.
"Habría sido agradable tener a alguien de mi parte, porque siempre tuve que defenderme a mí misma", ha añadido. Winslet reconoce que en sus inicios, cuando daba sus primeros pasos en Hollywood, habría querido ser valiente para alzar la voz durante las escenas íntimas y decir: "No me gusta ese ángulo de cámara. No quiero estar aquí haciendo un desnudo frontal. No quiero tanta gente en la sala. Quiero que mi albornoz esté más cerca. Cosas pequeñas como esas".
Tal y como ha seguido explicando la actriz, "cuando eres joven, tienes miedo de cabrear a la gente o parecer grosera o patética porque tal vez necesites esas cosas. Así que aprender a tener una voz propia en esos ambientes era muy, muy difícil".
Kate Winslet y la escena de sexo en 'Mare of Easttown'
Por suerte, con el paso de los años, la actriz ha podido expresar su opinión o desacuerdo en lo referente al rodaje de sus escenas íntimas. Hace tres años, Winslet, que ha sufrido críticas a su cuerpo desde sus proyectos más tempranos, se aseguró de que, en Mare of Easttown, el director Craig Zobel no borrara su "barriguita" en la escena de sexo entre su personaje y el de Guy Pearce.
Winslet quería que Mare fuera lo más realista posible y por eso trabajó con el departamento de vestuario en busca de prendas poco favorecedoras para su personaje. También pidió al equipo que iluminara su rostro de forma que no se viera bien: "He dado vida a Mare como mujer de mediana edad que soy, supongo que por eso la gente ha conectado con este personaje de la forma en la que lo ha hecho, porque claramente no hay filtros", explicaba en 2021.
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