[ESTE ARTÍCULO CONTIENE SPOILERS DE BERLÍN]
En Berlín hay tiempo para todo. El spin-off de La casa de papel que ahonda en los años dorados del ladrón de Pedro Alonso nos traslada a París para hablarnos de amor, de robos, de canciones improvisadas y, sí, también de acción. Al fin y al cabo, y pese a que esta precuela priorice la comedia romántica a los atracos, el universo de La casa no se entiende sin su buena dosis de adrenalina.
Esta vez, los protagonistas encargados de lidiar con las secuencias de acción más exigentes de la ficción han sido Julio Peña Fernández y Begoña Vargas, que encarnan a Roi y Cameron en la serie. Quienes ya hayan disfrutado de la ficción, recordarán que, además del robo a la casa de subastas parisina, Berlín guarda dos escenas de acción memorables, ambas protagonizadas por la pareja.
La secuencia más llamativa tiene lugar en el quinto episodio, justo después de celebrar el exitoso golpe a la casa de subastas, cuando la banda se separa y Roi se lleva a Cameron a una carrera de coches clandestina en las inmediaciones de un hangar. Ambos deciden participar en una carrera de coches nocturna en la que él conduce y ella se calza unas botas atornilladas al techo del vehículo.
Cameron consigue mantener el equilibrio sobre el coche durante gran parte de la competición, pero se desmorona cuando recuerda la ruptura con su expareja. Es entonces cuando pide a Roi que pare y pierden la carrera.
Segundos después, tras dar el vehículo robado con el que han participado al vencedor de la pugna, los protagonistas comparten una conmovedora charla dentro de una avioneta, en la que Cameron se abre a Roi y le cuenta la relación dependiente que tuvo con un músico con el que salió. Hablamos con los actores del rodaje de esta secuencia.
'Berlín': así se rodaron las escenas de acción
En nuestro encuentro con los actores, Peña Fernández reconoce que rodar tantas escenas de acción fue "duro": "Te das cuenta de todo el tiempo que lleva, de la cantidad de gente que hay involucrada. Pero ha sido muy divertido y me ha gustado mucho, la verdad".
Su compañera Begoña Vargas ha destacado el "frío" que pasaron en la escena del aeródromo mencionada previamente. "El aeródromo fue muy potente para ti, Begoña", asegura Julio: "Llevabas una chaquetita y estabas subida ahí arriba. Tuviste momentos en ese aeródromo que tenías que estar emocionalmente en una parte muy complicada y encima, por el frío, era todavía más jodido y más complicado".
Vargas asegura que rodar esta secuencia resultó "contradictorio": "A nivel físico, el cuerpo tenía que estar súper tenso por toda la velocidad, por toda la adrenalina, todo lo que está pasando, ese control del cuerpo... A la vez, la emoción, que para mí es relajar el cuerpo... Fue complicado, pero también aprendí mucho de todo esto".
La actriz también recuerda otro momento de acción que compartió con Peña Fernández, perteneciente al episodio 2, en el que ambos tratan de recuperar el cáliz que les ha permitido acceder a las catacumbas de París y terminan protagonizando una huida en moto por las calles de la capital francesa hasta llegar a un aparcamiento. "Toda la secuencia del parking fue muy larga de rodar porque cada día hacíamos un cachito", recuerda Vargas: "Pero ha quedado muy chula".
"Fueron diez días de rodaje, todos repartidos durante meses hasta el 2 o 3 de enero, que nos empaparon con la manguera unas cuantas veces", añade Peña sobre un rodaje en el que también pasaron mucho frío: "No sé cuántas tomas hicimos de esa empapada de la manguera de bomberos, pero sí".
Pese a las exigencias físicas y al frío, los actores coinciden en que poder realizar este tipo de tomas en Berlín ha sido una experiencia muy satisfactoria. "Yo había hecho algo de acción, pero no a este nivel", nos cuenta Vargas: "Y es duro. Son de esos días que llegas a casa reventada, pero también son los días que mejor duermes".
Otro protagonista que ha tenido su dosis de acción en la serie ha sido Joel Sánchez. En el séptimo episodio, el actor canario que interpreta a Bruce amenaza a dos gendarmes, desesperado por sacar a Keila (Michelle Jenner) del hospital sin que los atrapen. "La disfruté mucho", afirma Sánchez sobre la secuencia en la que apunta con dos pistolas a los agentes dentro del coche de policía, los hostiga en francés y los obliga a cantar Stayin’ Alive.
"Hablo español con secuencia en francés y con una canción en inglés, pero la disfruté mucho porque, al fin y al cabo, yo nunca voy a tener la oportunidad de poder estar apuntando a dos policías con dos pistolas", ríe el intérprete al recordar la escena: "Es lo bonito de esta profesión, que te hace vivir diferentes vidas. Está guay".
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