En 2019, Venecia agonizaba ante los más de 25 millones de visitantes que la ciudad recibía. Esto provocaba una caída considerable de la población autóctona, que decidía huir del histórico emplazamiento ante la avalancha de extranjeros. Los accidentes de los cruceros entre sus canales y las inundaciones terminarían por hacer el resto.
Dos años después, el panorama de La Serenísima es totalmente diferente, pero igual de conflictivo. La reducción del turismo y la marea baja tan solo han incrementado la problemática de una ciudad que ha pasado a vivir de un modelo de negocio en base a sus visitas. Ahora, el cineasta Álex de la Iglesia aborda este conflicto en su nuevo filme Veneciafrenia, donde muestra la batalla más sangrienta entre la población autóctona aferrada a su lugar de origen y los veraneantes, la fuente principal del colapso.
Para sorpresa de muchos, la película no era estrenada durante el marco de la pasada edición del Festival de Venecia. Algo que podría haber sido un gran guiño. No obstante, la relación del bilbaíno con el festival de Sitges viene de lejos, donde sus producciones de fantasía y terror siempre han sido recibidas con los brazos abiertos entre el público y la crítica. Así Veneciafrenia ha formado parte de la sección oficial fuera de competición.
Capitaneada por Ingrid García-Jonsson y compuesta de un reparto internacional con nombres como Cosimo Fusco (con el que De la Iglesia ha trabajado también en la serie de HBO 30 Monedas) o Caterina Murino (Casino Royale), el equipo de la película se paseaba por la alfombra roja de la ciudad catalana conquistando a los presentes.
En el quintento de jóvenes españoles en la búsqueda de fiesta desenfrenada en Venecia también encontramos junto a García-Jonsson a los fantásticos Alberto Bang (Pieles), Silvia Alonso (Durante la tormenta), Goize Blanco (Las favoritos de Midas) y Nicolás Illoro (El Cid). Un grupo de jóvenes que protagonizan un slasher atípico, con un psicópata florín en mano y fan de la ópera Rigoletto.
Muerte en Venecia
El turismo traducido como la peste del siglo XXI: así es Veneciafrenia. Un viaje de asesinatos y sangre a raudales, donde los elementos de su carnaval se convierten en el telón de fondo ideal para que bufones y arlequines hagan de las suyas sin ser descubiertos. Una pandilla de amigos españoles viaja para celebrar la despedida de soltera de una de ellas, cuando uno de los integrantes del grupo desaparece, los sucesos extraños y las persecuciones se dinamitan.
De la Iglesia demuestra una vez más su maestría en la creación de momentos cómicos entre la más pura tragedia y las muertes más sorprendentes e inesperadas, que han hecho que el estilo del cineasta se haya convertido en un verdadero icono en las comedias de terror. Un género en el que nos ha regalado títulos míticos como El día de la bestia, presente también en la 54ª edición del certamen por la celebración de sus más de 25 años de estreno.
Veneciafrenia se transforma así en la 15 película de ficción del cineasta, quien ya trabaja también en la producción de su siguiente proyecto: El cuarto pasajero. Supone una nueva colaboración junto a su eterno compañero de escritura Jorge Guerricaechevarría, y la productora y pareja del cineasta Carolina Bang.
Álex de la Iglesia nos invita a adentrarnos en el legado de una ciudad reconocida por su pomposo carnaval victoriano, sus paseos en góndolas y el glamour de su festival de cine, pero que adolece de grandes grietas internas que podrían originar que una de los emplazamientos más bellos del mundo se encuentre en peligro. Veneciafrenia llegará el próximo 26 de noviembre a las salas de cine españolas.
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