Aunque nunca soñó con ser actor, Shia LaBeouf nació en una familia de película: su madre era bailarina y diseñadora de joyería y su padre, un veterano de Vietnam que se ganaba la vida trabajando de mimo. Su abuela, además, era una poeta francesa lesbiana que colaboró con Allen Ginsberg.
A sus treinta y siete años recién cumplidos, LaBeouf ha trabajado para Spielberg y, actualmente, está rodando Megalópolis, el ansiado proyecto de Francis Ford Coppola que, en 2024, se hará realidad. Hijo secreto de Indiana Jones en la cuarta entrega y protagonista de la película original de Transformers (2007), la vida de este actor angelino acabará dándole el Óscar al que, dentro de unos años, protagonice su biopic. Estas son algunas de las curiosidades sobre Shia LaBeouf.
1. Un regalo de Dios con forma de solomillo
En hebreo, “Shia” significa “regalo de Dios”. Este era el nombre del abuelo del actor. LaBeouf, en cambio, tiene una traducción menos idílica: “es francés mal escrito”, confesó el actor en una ocasión, “pero correctamente pronunciado, significa carne de vaca. Así que mi nombre significa, literalmente, Regalo de Dios Carne de vaca”.
2. Una niñez entre el cannabis
El padre de Shia cultivaba marihuana, de la que era, también, asiduo consumidor. En una ocasión, el padre de LaBeouf le dio a probar un poco de su alijo personal. “Mi padre se pasó drogado toda mi infancia”, ya fuese por el cannabis o por la heroína a la que era adicto, admitió Shia. Sin embargo, el actor define ese periodo de su vida como “una niñez feliz”, ya que sabía que sus padres lo querían.
3. Un hombre de cincuenta años en el cuerpo de un niño de diez
Con diez años, Shia LaBeouf debutó en la comedia stand-up haciendo monólogos con humor adulto. Y, según su público, muy adulto. “Yo me subía al escenario y gritaba ‘¿Qué pasa, hijos de puta? Hora de un par de buenos chistes’ y la gente me miraba aterrada”, recordó Shia en una entrevista. “Creo que parte de mi éxito como cómico provenía de que mi material era asqueroso, propio de un hombre de cincuenta, pero quien lo decía era un niño de diez años”.
4. Sólo por la pasta
Shia nunca quiso ser actor para protagonizar grandes películas, dar rienda suelta a su talento o zambullirse en la piel de Julio César, Hitler o Elvis Presley. Shia quería ser actor para ganar dinero. “Me pareció que era una forma fácil de hacerme rico y lo intenté”, confesó en una entrevista el intérprete.
5. “Soy el representante de Shia LaBeouf”
Para lograr un trabajo en la industria del cine, alguien tenía que abrirle la puerta. Sin padrinos a los que recurrir, Shia confió su futuro a una estratagema tan simple y efectiva como esta: buscó el número de teléfono de un agente de Hollywood, lo llamó y se hizo pasar por “el representante del actor Shia LaBeouf”. Y dio resultado: acabó protagonizando la serie Mano a mano. Tenía doce años.
6. Cereales de Oreo
La fama es un horizonte ingrato de trasponer y, en ocasiones, los anuncios comerciales pueden convertirse en un atajo oportuno para llegar a lo más alto. En el caso de LaBeouf, fue así: En 1998, apareció en un anuncio de cereales para la marca Oreo.
7. Una inspiración…y algo más
En 2013, Shia LaBeouf dirigió su propio cortometraje, titulado Howard Cantour.com. Al verlo, algunos espectadores advirtieron ciertas similitudes con un cómic de Dan Clowes. “Sólo me inspiré en él”, se defendió Shia al señalársele que al menos tres partes de su corto provenían del cómic de Clowes. Finalmente, el actor retiró el vídeo y confesó que, tal vez, “se había perdido un poco” en el proceso creativo, y su inspiración había llegado demasiado lejos.
8. A un lado y otro de la pantalla
En 2015, Shia LaBeouf vio toda su filmografía en orden inverso de producción, empezando por Man Down (2015). En total, 72 horas de cine, proyectadas en el Angelika Film Center para Shia, pero también para cualquier otro seguidor del actor que quisiera acompañar a su ídolo en esta maratón cinéfila de tres días de duración.
9. Dos religiones
Shia nació en el seno de una familia judía: su propio nombre, como se ha dicho, es hebreo. Sin embargo, en 2022, el actor renunció a su credo y se convirtió al catolicismo: “Ahora sé que Dios está usando mi ego para atraerme hacia él”, dijo en una entrevista.
10. Menos fiestas
Su vida fuera del cine le ha deparado no pocos percances, con varias detenciones y excesos de todo tipo. No obstante, Shia está decidido a cambiar: “estoy haciendo un esfuerzo muy calculado por permanecer lejos de las fiestas”, dijo en una ocasión. “Quiero tomarme en serio mi carrera”.
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