El poder de la familia: qué significa esa escena poscréditos de 'Fast & Furious X'

Hay una película básica para entender los derroteros que toma la trama en Fast & Furious X: la quinta entrega. Fast & Furious 5 y en concreto su clímax, donde Dom Toretto y Bryan O’Conner (Vin Diesel y Paul Walker) arrastraban una caja fuerte por Río de Janeiro destruyéndolo todo a su paso. Incluyendo a su enemigo Hernán Reyes (Joaquim de Almeida), que al parecer tenía un hijo llamado Dante. Este está interpretado por Jason Momoa, y su venganza focaliza la trama de Fast & Furious X.

La última película de la saga hasta la fecha, donde Louis Leterrier sustituye a Justin Lin, pone a la familia de Dom contra las cuerdas, en función a la obsesión de Dante por castigar a los protagonistas. Resulta ser un enemigo tan formidable que, contrariamente a la costumbre, Fast & Furious X no concluye con su derrota: en vez de esto tenemos un cliffhanger que nos remite a una continuación (¿Fast & Furious X-2?) y posiblemente a una tercera parte, según últimas declaraciones de Diesel.

[A partir de aquí spoilers de Fast & Furious X]

Así que el film termina con una lucha entre Dom y Dante que termina poniéndose fea: su hermano Jakob (John Cena) aparenta haber muerto, y también el equipo que lidera Roman Pierce (Tyrese Gibson). Una vez la trama vuelve brevemente a Letty y Cypher (Michelle Rodríguez y Charlize Theron), que se topan en la Antártida con una vieja conocida, irrumpen los créditos finales. Y, como es costumbre en cada blockbuster de nuestra época, estos tienen al final una escena muy jugosa.

Qué pasa en la escena poscréditos de 'Fast & Furious X'

Recalquemos lo de Río de Janeiro. El origen de Dante como villano parte de ahí, y además Fast & Furious 5 fue la película donde debutó Dwayne Johnson como Luke Hobbs. Este agente especial, aliado ocasional de Toretto, también contribuía a la caída de Reyes, y se convertía en miembro de facto de la familia. ¿El problema? Que detrás de las cámaras tuvo muchas diferencias con Diesel, diferencias que llevaron primero a Hobbs & Shaw y luego a su aparente salida de la franquicia.

Johnson reapareció en la sexta, séptima y octava entregas (donde lideraba a la familia durante la aparente transformación de Dom en villano): no así en Fast & Furious 9. La razón fueron sus desencuentros con el protagonista y productor de la saga, que aparentaban haber terminado con las opciones de que Hobbs formara parte de la historia principal. Teniendo esto en mente, volvamos a los créditos de Fast & Furious X.

Luego de los títulos principales, la trama nos lleva a una casa asaltada por un equipo de élite. Se trata de una casa peculiar y muy misteriosa, con decoración antigua y una televisión que emite un viejo programa. En este contexto el líder de este equipo recibe un mensaje de Dante, que recuerda que en el incidente de Río de Janeiro Toretto no estaba solo: Luke Hobbs le había ayudado. Y Dante también quiere vengarse de él.

Cinemanía

Dante, que ha puesto a Toretto y su familia en los apuros más peliagudos de su trayectoria, también busca a Hobbs. Es entonces cuando el líder del equipo se quita su pasamontañas y resulta ser… el mismo Hobbs. Dwayne Johnson. El cual, ante el mensaje de Dante, se muestra preparado para verse las caras con él, y aplasta el teléfono móvil con sus propias manos remitiéndonos a cuando este mastodonte destruyó la escayola de su brazo para acudir al clímax de Fast & Furious 7.

Fundido a negro. Sí, Johnson está de vuelta a la franquicia, y todos somos mucho más felices por ello. Con lo cual es casi seguro que formará parte de Fast & Furious X-2 y, si hay tercera parte, quizá también de esta. Un gran día para la familia Fast.

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