La secuela de 'Tomb Raider' con Alicia Vikander está en problemas

La venta de MGM a manos de Amazon ha provocado ciertos baches en el proyecto.
Alicia Vikander en 'Tomb Raider'
Alicia Vikander en 'Tomb Raider'
Alicia Vikander en 'Tomb Raider'

A la Tomb Raider de 2018 le fue razonablemente bien en taquilla. Roar Uthaug, con la connivencia de Alicia Vikander, había entregado una nueva adaptación de los videojuegos más fiel y realista que las dos películas previas protagonizadas por Angelina Jolie, obteniendo la recaudación suficiente como para que MGM, el principal estudio impulsor, creyera buena idea ponerse con una segunda parte. En un principio pareció ir con todo, al anunciar a Ben Wheatley (High Rise) como sucesor de Uthaug. El primer percance vino cuando Wheatley tuvo que desentenderse por su compromiso con la secuela de Megalodón.

Entonces fue sustituido por Misha Green, showrunner de Territorio Lovecraft. Esta serie de HBO, con cinco nominaciones al Emmy, fue cancelada tras una única temporada, y Green fue muy pública con respecto a los planes que quedaban abortados (confirmó que ya había planeado una segunda entrega, Territorio Lovecraft: Supremacy). Sea como sea, Tomb Raider parecía en buenas manos con Green, pero entonces fue la propia MGM a la que le tocó atravesar problemas. Hasta el punto, según ha declarado Vikander para Entertainment Weekly, de que Tomb Raider 2 se encuentra actualmente en el limbo.

Estos días la ganadora del Oscar por La chica danesa se encuentra de actualidad al protagonizar Irma Vep, serie sobre el mundo del cine que desarrolla Olivier Assayas y que en España podemos ver a través de HBO Max. Vikander ha continuado, así, con su exitosa carrera al margen de la arqueóloga, pues declara que los recientes avatares de MGM han entorpecido el desarrollo de la secuela de Tomb Raider. “No puedo decir mucho”, aclara, pero responsabiliza a la compra de MGM a manos de Amazon de los percances sufridos. “Con la compra de MGM y Amazon, no tengo ni idea. Ahora todo es cuestión de política”.

“Creo que Misha y yo ya nos hemos preparado, así que está en manos de otras personas, para ser sincera”, añade Vikander, mostrando una gran confianza en la visión de Green. “Me encanta lo que hizo en Territorio Lovecraft. MGM ha sido una de las empresas más golpeadas por la pandemia, al sufrir Sin tiempo para morir tantos retrasos de estreno (con el consiguiente perjuicio económico), que el estudio entró en bancarrota y se puso en venta en 2021. Amazon fue quien terminó adquiriendo la marca, pasando a poseer (además de la saga de James Bond) 4.000 películas y 17.000 programas de televisión.

Es lógico intuir que MGM se encuentra en plena transición junto a sus nuevos dueños, y parece que desarrollar una secuela de Tomb Raider ha perdido prioridad en este escenario. 

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