En su día, Titanic se convirtió en la película más taquillera de todos los tiempos, récord que mantuvo hasta que en 2009 otra película de James Cameron le arrebató el puesto: Avatar. Pero hasta ese momento, fueron 12 años los que se mantuvo en la cima el largometraje sobre el crucero más famoso del mundo.
La historia protagonizada por Leonardo DiCaprio y Kate Winslet fue todo un éxito, aunque no siempre pareció que fuera a acabar de esa manera. El propio Cameron ha reconocido los enormes gastos de producción que tuvo y el escepticismo que hubo en la época sobre la posibilidad de recuperar lo invertido.
"La escala de todo estaba por encima de cualquier cosa que hubiéramos imaginado basándonos en experiencias previas. En aquel momento pensamos que no había manera de recuperar todo el dinero. Era imposible", explicó el cineasta en una entrevista para Los Angeles Times.
Durante el rodaje se llevaron a cabo muchas decisiones para mantenerse dentro de lo establecido por el presupuesto inicial. Llegaron a ahorrar 750.000 dólares al desechar la idea de un set completo que estuviera previsto para inclinarse en un ángulo de tres grados y emplear en su lugar dos decorados distintos: uno para las escenas previas al impacto con el iceberg y otro con una pendiente de seis grados para replicar el hundimiento.
"Si el estudio se hubiera salido con la suya, habrían cortado todo el hundimiento del barco. Lo más inteligente que hicimos fue hundirlo al final. No fue por estrategia, sino simplemente porque hundes el decorado en último lugar, de lo contrario no queda tan bien a la mañana siguiente cuando lo vuelves a subir", afirmó el director.
Pero la elección más peculiar tuvo que ver con el casting de los extras. Para garantizar que el barco mantenía su apariencia masiva, limitaron la altura máxima que podían alcanzar los figurantes. "No seleccionamos a nadie que midiera más de cinco pies y ocho pulgadas (1,72 metros aproximadamente). Es como si obtuviéramos un millón de dólares extra gracias a esto", añadió James Cameron.
Titanic llegó a España a principios de 1998, un mes después de hacerlo en Estados Unidos, en diciembre del año anterior. Este 2023, con motivo del 25 aniversario, la película volvió remasterizada a las salas de cine con un formato en 4K y 3D HFR. Ahora, esta versión está disponible en Blu-ray.
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