John Waters es un cineasta peculiar, lo que se llama de nicho o de culto. Pero a quien le gusta desde el principio, aunque sea un poco, lo acaba adorando. Henar Álvarez forma parte de ese reducido pero acérrimo club de fans del director de Pink Flamingos. Aunque su favorita, como ella misma confiesa, es Cosa de hembras (Female Trouble).
"John Waters era un visionario y cada vez que veo algo suyo descubro cosas nuevas y muy adelantadas a su tiempo", afirma la guionista y cómica, que se pasa por el quinto episodio de Rebobina para hablar de su fascinación por la obra del realizador norteamericano. Junto a Isabel Vázquez y Alberto Rey, Álvarez repasa la filmografía del cineasta que empezó con Mondo Trasho en 1969 y de cuya última película, Los sexoadictos, han pasado ya más de quince años. Y eso que fue la primera que Henar vio en televisión.
Y no solo de Waters se vive, porque entre la alocada y variopinta troupe habitual en sus películas (que llegó a contar con Johnny Depp o Melanie Griffith, entre otros), hay un nombre que destaca con letras rosadas y brillantes, el de Divine.
En Cosa de hembras (Female Trouble), Divine da vida a una adolescente que, en la que es la escena favorita de Henar Álvarez, se escapa de casa para convertirse en una modelo algo particular. Para la autora del cómic feminista Mala leche, la fascinación por director y protagonista llega a tal punto que llegó a visitar Baltimore, ciudad natal de ambos. Allí le sucedieron un sinfín de peripecias que incluyen una pedida de matrimonio improvisada al pie de la tumba de Divine, nada menos. Como en una película de John Waters.
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