El cine de acción no se ha recuperado desde Mad Max: Furia en la carretera. George Miller nos mostró las persecuciones más frenéticas en una apabullante secuela de la saga que él mismo había creado, tan buena como para acaparar las categorías técnicas de los Oscar de su año. Como es natural, un éxito así debía tener continuidad, y Warner Bros. se puso de inmediato a trabajar en una posible prolongación. Esta tendrá forma de precuela, centrándose en los orígenes del personaje que interpretó Charlize Theron junto a Tom Hardy. Su nombre, Imperator Furiosa.
Anya Taylor-Joy sustituye a Theron como el personaje, sin embargo, en una película cuya principal preocupación es la de tener que superar o siquiera equipararse a la excelencia del film anterior. Es una preocupación que ya se ha rastreado en la recepción de su primer tráiler (donde algunos usuarios destacaron el abundante uso del CGI) y que quizá también haya marcado la actitud de Miller a la hora de proponerse articular una acción tan impactante como la de Furia en la carretera. Es lo que explicaría que Furiosa: De la saga Mad Max cuente con una secuencia de acción de 15 minutos que necesitó 78 días para rodarse.
Fue una secuencia tan compleja (200 especialistas estuvieron trabajando a diario) que hasta tuvo nombre propio: Stairway to Nowhere, “Escalera a ninguna parte”. Nos hemos enterado de su existencia en un reportaje de Total Film que repasa los entresijos de su producción, y donde se aclara que Miller estuvo planificándola con sumo cuidado, desarrollando múltiples storyboards. Taylor-Joy se ha sincerado sobre el proceso.
“George y yo tuvimos conversaciones sobre por qué esta pieza en particular era tan larga. Se debe a una acumulación de habilidades en el transcurso de una batalla, y eso es importante para entender lo ingeniosa que es Furiosa, pero también su valentía” , cuenta para el reportaje. “Es la secuencia más larga que hemos rodado. El día que terminamos, ¡todo el mundo recibió un vino de Escalera a ninguna parte!”.
Furiosa: De la saga Mad Max, con un presupuesto de 160 millones de dólares, también cuenta en el reparto con Chris Hemsworth. Su estreno está programado para el 24 de mayo, aunque semanas antes tendrá su premiere mundial en el Festival de Cannes. Ahí ya empezaremos a intuir si Miller ha sabido estar a la altura de su furioso legado.
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