Si su papel como Paloma, chica Bond en Sin tiempo para morir junto a Daniel Craig, apenas duraba unos 15 minutos, "esto es otro nivel, una película entera" también plagada de acción, comentaba Ana de Armas a principios de año en The Tonight Show sobre Ballerina, el spin-off inscrito en el universo de John Wick, en la que será la gran protagonista. Y allí también estará el mismísimo John Wick, es decir, Keanu Reeves, esta vez no como protagonista, pero sí con una anunciada presencia secundaria, pero relevante, en la película.
Con la cuarta entrega de la saga triunfando actualmente en los cines, con 250 millones de dólares recaudados en menos de dos semanas, la compañía Lionsgate, distribuidora norteamericana de Ballerina, no ha tardado demasiado en anunciar cuándo piensa estrenar esta nueva aventura cinematográfica y será el 7 de junio de 2024 en cines.
La historia se centrará en una de las jóvenes e implacables asesinas de la Ruska Roma (la mafia rusa), que pudimos ver en John Wick 3: Parabellum, en una institución dirigida por una veterana y enigmática mujer (Angelica Huston) a la que Wick acudía para reclamar uno de los favores que le podrían salvar la vida, teniendo en cuenta que tenía todo el ejército de sicarios de la Alta Mesa persiguiéndole.
Allí también descubríamos que entre las disciplinas que recibían las chicas de la Ruska Roma, formando parte de sus entrenamientos para convertirse en máquinas de matar, estaba el ballet. Podría parecer contradictorio, pero al mismo tiempo que preparaban sus movimientos con delicadeza y gracia, también les servía para fortalecerlas física y mentalmente.
El spin-off también contará en su reparto con Angelica Huston y el recientemente fallecido Lance Reddick, como Charon, el eficiente conserje del Continental, e Ian McShane, el gerente del hotel. Además de Norman Reedus (de The Walking Dead), Gabriel Byrne o Catalina Sandino Moreno.
Todos ellos a las órdenes de Len Wiseman, de la saga Underworld, como director y el mismo Chad Stahelski, el director de las cuatro entregas de John Wick, entre los productores para una historia, con guion escrito por Shay Hatten (tambien uno de los guionistas de la franquicia), en la que su protagonista emprenderá una implacable venganza contra aquellos que asesinaron a toda su familia.
En definitiva, un blockbuster al servicio de una versátil Ana de Armas que precisamente este año ha recibido su primera nominación al Oscar como actriz principal por su ejemplar interpretación de Marilyn Monroe en (la detestada, pero también con defensores) Blonde de Andrew Dominik, y cuya estatuilla fue a parar a manos de Michelle Yeoh por Todo a la vez en todas partes.
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