La isla de Tenerife es un auténtico paraíso en la tierra. En este territorio canario podremos adentrarnos en enclaves sumamente diferentes, desde paisajes volcánicos en El Teide hasta bosques de laurisilva en el Parque Rural de Anaga, pasando por otros impresionantes parajes como los Acantilados de Los Gigantes, el Valle de la Orotava y las charcas de Erjos, sin olvidar las espectaculares playas de la isla.
Para poder conocer de primera mano estos espacios naturales, lo mejor es adentrase en ellos con una ruta de senderismo. Por ejemplo, en el Parque Rural de Anaga es donde encontramos el llamado sendero de Las Vueltas, que nos lleva hasta uno de los pueblos más bonitos de Tenerife.
El sendero de Las Vueltas
El sendero de Las Vueltas era "constituía, hace muy poco, la única vía de comunicación del pueblo de Taganana con Santa Cruz y La Laguna", explican desde Turismo de Tenerife. Fue bautizado así porque, según la tradición, tiene tantas como días tiene el año. A día de hoy, se ha convertido en atractivo turístico perfecto para los amantes del senderismo.
El recorrido es de dificultad media, se extiende por 4,5 kilómetros y tiene una duración de alrededor de 2 horas y 30 minutos. El punto de partida es la Casa Forestal del parque, junto a la carretera general TF-12. Desde allí parte un camino de tierra, con el que empezaremos a ganar altura.
Poco a poco iremos subiendo rodeados de una densa masa forestal de hayas y brezos, y nos toparemos con una cueva. Es en ese momento cuando el camino se convierte en un descenso, y nos sumerge de lleno en un bosque de laurisilva. Además, en algunos puntos podremos ver el empedrado original que tuvo antaño este sendero.
Poco después, los árboles disminuyen y dejan ver una panorámica única de la costa. Continuamos caminando hasta la carretera de Los Naranjos y, después de cruzarla, tomaremos un camino empedrado que finalmente nos lleva hasta el pueblo Taganana.
Esta villa nos regala una postal de ensueño, en la cual las casitas tradicionales de color blanco se escalonan en la ladera de la verde montaña, las aguas del Atlántico como acompañante. En su núcleo encontraremos algunos edificios históricos de interés, como la iglesia de Nuestra Señora de las Nieves, una de las más antiguas de toda la isla Tenerife.
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