Qué hacer en Tokio en un día totalmente gratis: un itinerario sin coste por la capital de Japón

La gigantesca urbe es apta para todos los bolsillos, ya que no hace falta tener un presupuesto muy alto para disfrutar de ella. Hay muchos lugares turísticos que podremos visitar sin pagar nada, desde templos y santuarios, hasta parques y miradores.
Calle de Tokio.
Calle de Tokio.
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Calle de Tokio.

La ciudad de Tokio es la puerta de entrada para la mayoría de viajeros que llegan a Japón. Esta masiva ciudad tiene atractivos para todos los gustos, desde templos llenos de historia hasta abarrotadas calles comerciales a la sombra de enormes rascacielos.

Además, también es una urbe apta para todos los bolsillos, y es que no hace falta tener un presupuesto muy alto para disfrutar de ella. De hecho, desde Turismo de Japón recomiendan un itinerario para pasar un día en la capital japonesa solo con paradas turísticas gratuitas, incluyendo templos y santuarios, parques, miradores y mucho más.

Empezamos en Asakusa

Templo Sensō-ji.
Templo Sensō-ji.
Lo Chun Kit

El itinerario comienza en el barrio de Asakusa, que combina a la perfección lo tradicional y lo moderno. La primera parada sería el templo más antiguo de Tokio, el Senso-ji, donde destaca la pagoda de cinco pisos, la Puerta Kaminarimon y la calle Nakamise dori. La visita es totalmente gratuita, aunque se pueden dejar donaciones.

En este barrio también podemos ir al Parque Sumida, pasear por la orilla del río homónimo, contemplar las diferentes esculturas que lo adornan y disfrutar de la floración de los cerezos durante la primavera.

De compras en Odaiba

Estatua de Gundam en Odaiba.
Estatua de Gundam en Odaiba.
iStock

La isla artificial de Odaiba es el lugar perfecto para pasar ir de compras, al mismo tiempo que disfrutamos de atracciones turísticas de lo más curiosas. Por ejemplo, podremos hacernos una divertida foto con la enorme estatua del personaje de anime Gundam o pasear por el Parque Costero de Odaiba, que nos regala una panorámica única de la ciudad de Tokio.

En la isla encontraremos masivos centros comerciales como Diver City o Palette Town, que acoge una de las mayores norias panorámicas del mundo y una zona de compras, Venus Fort, con un diseño inspirado en una ciudad europea del siglo XVII.

Roppongi y el Centro de Arte Nacional

Centro de Arte Nacional de Tokio.
Centro de Arte Nacional de Tokio.
Getty Images

Continuamos en el distrito de Roppongi, que nos espera con una variada oferta de museos, galerías y exposiciones. Aquí podremos visitar el Centro de Arte Nacional, de entrada gratuita. Su fachada ya nos sorprende, con un diseño que imita las olas del mar, y en su interior cuenta con decena de galerías con exposiciones temporales.

El dinamismo de Shibuya

people walking across the Shibuya crossing in Tokyo, Japan
Cruce de Shibuya.
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No hay duda de que uno de los lugares turísticos más icónicos de Tokio es el cruce de Shibuya. Hasta 3.000 personas llegan a cruzar este paso de cebra a la vez. Si queremos observar esa marea de gente, las mejores vistas las tendremos desde las plantas superiores de los edificios comerciales que hay frente a la estación o desde la propia estación entre las líneas JR y la línea Keio Inokashira.

En esa misma zona encontraremos otro punto muy fotografiado, la estatua de Hachiko. Podemos terminar de disfrutar de Shibuya dando un paseo por sus calles llenas de tiendas y restaurantes o por el nuevo Parque Shibuya Miyashita, un edificio de tres plantas con un enorme parque en la azotea.

Harajuku, de un santuario a un parque olímpico

Santuario Meiji.
Santuario Meiji.
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La siguiente parada será el santuario Meiji, un  santuario sintoísta dedicado a los primeros emperadores de la era moderna de Japón, el emperador Meiji y la emperatriz Shoken. Este se construyó en 1920 y su entrada es gratuita. 

Podemos aprovechar la visita para acercarnos también al Parque Yoyogi, que se creó con motivo de los Juegos Olímpicos de Tokio de 1964. Aquí podremos pasear, tumbarnos a hacer un pícnic, montar en bicicleta o subir a su mirador.

Acabamos en Shinjuku

Kabukicho por la noche.
Kabukicho por la noche.
Getty Images/iStockphoto

Finalmente, la última parada de este completo itinerario es Shinjuku. En este barrio se alza el imponente Edificio Gubernamental Metropolitano de Tokio, un rascacielos con dos torres con miradores, desde donde contemplar la ciudad a más de 200 metros de altura. El acceso es gratuito y es recomendable ir al atardecer.

Al caer la noche, podemos acercarnos a la zona de Kabukicho y dejarnos sorprender por sus luces de neón, su ambiente festivo y sus muchísimos restaurantes para todos los presupuestos.

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