Son muchos los que han soñado con culminar las cumbres más altas del planeta, pero solo unos pocos lo han conseguido. Esto requiere de una condición física sin igual y de una extrema fortaleza mental para soportar las condiciones que la montaña somete al alpinista. Sin embargo, gracias a los teleféricos, algunos picos permiten subir hasta lo más alto sin necesidad de crampones, piolets y arneses.
En la cordillera de los Alpes, son cuatro las cumbres que se pueden coronar gracias a los teleféricos. Además, uno de ellos es el más alto de Europa al ascender hasta los 3.842 metros. Todos ofrecen unas vistas espectaculares en las que el color blanco de la nieve y los mares de nubes se entremezclan con la imponente montaña. El libro Lo mejor de los Alpes: Experiencias y lugares auténticos (LonleyPlanet) muestra lo mejor de estas cimas y sus secretos.
1) Los glaciares de Meije
Los glaciares de Meije es el área central del esquí fuera de pista, del senderismo y el alpinismo. Es muy fácil llegar hasta ellos gracias al teleférico de La Grave, el cual se divide en dos tramos. El primero (20 €) asciende hasta los 2.400 metros y desde allí parten las diferentes rutas de senderismo. Por su parte, el segundo tramo (30 €) sube hasta los 3.200 metros, ofreciendo una de las mejores panorámicas de los Alpes.
Otro punto de interés es la impresionante cueva de hielo, la cual se puede visitar desde junio a septiembre. Su precio es de 4,50 € y alberga una colección de esculturas hechas sobre hielo.
2) Aiguille du Midi
Las vistas que ofrece la cima de la Aiguille du Midi son espectaculares. A las "puertas del cielo" y con el Mont Blanc aguardando imponente, el teleférico que sube hasta ella es una experiencia única. Este solo tarda 20 minutos es ascender hasta los 3.777 metros y gracias a un ascensor ubicado en la estación se puede acceder a la terraza de la cima, a 3.842 metros. Esto lo convierte en el teleférico más alto de Europa y uno de los más impresionantes del mundo.
A esto se le suma la experiencia Pas dans le Vide (paso en el vacío), una cabina de cristal en la que bajo los pies hay más de mil metros de caída libre. Es algo obligatorio, ya que la vista 360º que ofrece con el Mont Blanc coronando es inimaginable. El precio de este teleférico oscila entre los 70 € y los 90 €.
3) Cima del Brévent
Esta cima se localiza en el balcón sur del valle de Chamoix y se está orientada al Mont Blanc. Además, culmina en una altitud de 2.225 metros, en el extremo meridional de la Réserve Naturelle des Aiguilles-Rouges. Para ascender a la cumbre se debe coger una telecabina en Chamonix que deja al viajero en Planpraz, a 1.999 metros, y desde allí un teleférico termina la subida. El precio de todo el recorrido es de 29,80 €.
4) Cima del Caron
Tan solo hacen falta cuatro minutos para ascender a esta magnífica cima, a 3.195 metros de altitud. A la salida del teleférico las vistas son espectaculares, ya que la inmensidad de cumbres que se pueden divisar abarca los Alpes franceses, italianos y suizos. Además, el precio de este ascenso es de tan solo 18 €.
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