Las bombas de calor son sistemas de calefacción que capturan el calor de distintas partes para enviarlo al interior de un edificio (puede ser una vivienda, una oficina o una tienda). Para hacerlo, necesita distintos componentes, de los que ya hemos hablado anteriormente en un artículo.
Dependiendo de dónde obtenga el calor, podemos hablar de distintos tipos de bombas de calor. Por ejemplo, si se obtiene del agua, hablaríamos de una hidrotermina; si se extrae de la tierra, la llamaríamos geotermia; si se consigue del aire, sería una aerotermia.
Muchos usuarios creen que bomba de calor y aerotermia son sinónimos, puesto que estamos más acostumbrados a ver bombas de calor que extraen el calor del aire que del agua o de la tierra. No obstante, hay otros métodos de extracción del calor (ya mencionados), por lo que la aerotermia no es una forma de llamar a la bomba de calor, sino un tipo de bomba de calor.
Estos sistemas de calefacción obtienen la energía de fuentes externas, gratuitas y sostenibles, por lo que son una buena opción a la hora de escoger un equipo de climatización para el invierno. Además, el mismo procedimiento puede usarse para un sistema de refrigeración, a través de bombas de frío.
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