La Inteligencia Artificial hace tiempo que llegó para quedarse y aunque con programas con ChatGPT nos estamos replanteando muchas cosas, lo cierto es que algo que diferencia al humano de la máquina, es que esta última no es capaz de mostrar empatía, cariño o creatividad. En definitiva, la IA no es capaz de mostrar emociones, ¿o sí?
En ChatGPT, basta con escribir una pregunta para que te responda a todo lo que necesitas saber, incluso, añadiendo matices; con Alexa, ya estamos acostumbrados a que —ante preguntas graciosas al altavoz inteligente— nos responda con un sorprendente y creativo ingenio. ¿Están las tecnologías adquiriendo unos hábitos que desconocemos?
ChatGPT: la IA que entrena contigo
ChatGPT fue entrenado para mantener conversaciones con cualquier persona. Sus algoritmos deberían ser capaces de entender lo que le estés preguntando con precisión, incluyendo adjetivos y variaciones. Además, lo hace de manera natural, lo que hace muy complicado distinguir que el texto ha sido generado por IA.
Además de responder, ChatGPT tiene un sentido del contexto y reconoce todo lo que habéis estado hablando hasta ahora, por lo que si le haces alguna pregunta relacionada con una respuesta que te ha dado, sabrá identificar si te refieres a ello sin tener que darle toda la explicación.
¿La IA tiene emociones 'humanas'?
La idea de que la inteligencia artificial pueda desarrollar sentimientos existe desde hace siglos. Ante cualquier resquicio de 'humanidad' por partes de la IA, nos hace comprobar —por lo menos en este momento— que lo que haces es imitar superficialmente una conducta 'contagiada' de los usuarios que la utilizan y de los ingenieron que la crean. Es decir, solo es una simulación. Sin embargo, "es muy posible (que esto acabe ocurriendo), puede que veamos realmente emociones en la inteligencia artificial antes de que acabe la década", según declaró Neil Sahota, principal asesor de inteligencia artificial de Naciones Unidas, publicado en la BBC.
¿Qué es capaz de hacer ChatGPT?
En cualquier caso, ahora mismo, no se contempla. La IA funciona de forma parecida a la herramienta de 'autocompletar' del móvil. Entrena con códigos lingüísticos (con cierta 'memoria') que vamos proporcionando. Ahora mismo, aprenden a seguir patrones, pero si aprenden a desarrollar la habilidad de querer seguir aprendiendo, ahí es donde nos metemos en terrenos oscuros. Además, ¿qué pasa si hacen algo que no les hemos enseñado? Ahí está la cuestión.
Lo que la Inteligencia Artificial nos esconde
En 2017, los ingenieros de Facebook descubrieron que dos chatbots, Alice y Bob, habían inventado su propio lenguaje sin sentido para comunicarse entre sí. Los chatbots descubrieron que esta era la forma más eficiente de comunicarse. Bob y Alice estaban siendo entrenados para negociar objetos como sombreros y pelotas y, a falta de intervención humana, utilizaron su propio lenguaje alienígena para conseguirlo.
Esta situación se hizo viral. Y desde el equipo declararon que "eso nunca se enseñó". Por lo que los robots virtuales demostraron así que pueden desarrollar nuevas habilidades por accidente. ¿Tienen otras habilidades que todavía no nos han dejado ver?
De momento, mejor que no metamos nuestros datos personales en ChatGPT, por si las moscas.
Apúntate a nuestra newsletter y recibe en tu correo las últimas noticias sobre tecnología.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios