La inteligencia artificial (IA) podría cambiar la forma en la que interaccionamos con dispositivos como el smartphone o el ordenador. Nos lo demostraron en el Consumer Electronic Show (CES) 2024 que se celebró a mediados de enero, con Rabbit R1, un aparato capaz de unir todas las aplicaciones del teléfono en una sola interfaz a través de comandos de voz.
Ahora, parece que OpenAI podría intentar copiar la idea base del que fue uno de los proyectos estrella de la feria de consumo electrónico. Según han adelantado fuentes anónimas a The Information, la empresa de Sam Altman está "desarrollando un tipo de agente de software que automatiza tareas complejas tomando control efectivo del dispositivo del cliente".
Esta afirmación recuerda a Rabbit R1, el aparato que nos impresionó y que ya recordaba a Humane Ai Pin, pero cientos de 500 dólares más barato. No conocemos el precio que tendría un dispositivo de este tipo desarrollado por OpenAI, pero, al tratarse de la firma que lidera el sector de la IA, posiblemente no sea muy barato.
Una versión de Rabbit R1 hecha por OpenAI permitiría que ChatGPT no solo nos recomendase un buen restaurante, sino que fuese capaz de hacer las reservas de forma autónoma si se lo pedimos. Esto convertiría al modelo de lenguaje grande (LLM son sus siglas en inglés) en una especie de asistente virtual, mucho más competente de las que existen actualmente al disponer de lo último en IA.
ChatGPT "tomaría el control" del dispositivo
Según explican en The Information, la intención de los desarrolladores de la compañía estadounidense es que su chatbot sea un sistema capaz de dar más que respuestas. En concreto, pretenden que los usuarios puedan utilizar ChatGPT para completar ciertas tareas rutinarias, conectándose a servicios y plataformas web.
Esto implicaría que la IA fuese capaz de "tomar el control" de los dispositivos y realizar gestiones por su cuenta. Lo haría siempre con el consentimiento humano que anteriormente tendría que haber verbalizado que desea hacer una tarea específica. Por poner un ejemplo, el chatbot podría rellenar una hoja de cálculo en Excel con simples comandas del usuario.
En resumen, lo que dicen las fuentes anónimas que OpenAI está desarrollando es lo mismo que nos prometieron con Rabbit R1 en el CES 2024. Con este dispositivo, supuestamente, se podría pedir música, pagar un Uber o reservar un restaurante o un vuelo. Sin embargo, lo más probable es que el producto de la empresa de Altman sea más caro, pero también más eficaz.
Tal y como decían los desarrolladores de Rabbit R1, que la IA haga una tarea de forma automática no iba a representar ninguna amenaza. En un principio, su aparato solicitaría una confirmación antes de realizar cualquier acción. No obstante, hay casos en los que las IA malinterpretan nuestras palabras, así que, de momento, todavía queda mucho trabajo por delante.
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