Cinco cosas que tal vez no sabías de la hidratación de los codos, rodillas y talones

La hidratación del cuerpo, tanto interna como externa, es uno de los cuidados básicos y diarios, ya que supone una forma de mantener la parte más visible del cuerpo, la piel, en óptimas condiciones. 

Sin embargo, hay zonas que requieren una especial atención y que, a menudo, pasan desapercibidas. Se trata de las zonas de los codos, las rodillas y los talones, las tres partes del cuerpo más expuestas a la sequedad. 

Así, estos son algunos consejos y recomendaciones para cuidar la salud e hidratar correctamente estas tres zonas del cuerpo, tal y como indican desde Promofarma. 

El lavado y la exfoliación, el primer paso 

En primer lugar, para cuidar la salud de la piel de estas tres zonas tan expuestas a la sequedad y a las agresiones externas, lo que hay que hacer es lavar diariamente estas tres zonas con una esponja o un guante exfoliante, lo que permite eliminar las pieles muertas. 

Además, como elementos naturales y exfoliantes se puede usar arena o arcilla, lo que ayuda a quitar pieles muertas y también las durezas o asperezas, otorgando luminosidad y suavidad a la piel.

Cremas hidratantes

Tras exfoliar y limpiar bien las zonas, es el momento de hidratar, para lo que se puede optar por cremas hidratantes. 

Para aplicarlo, lo mejor es hacerlo después de la ducha, al igual que el resto del cuerpo, pero también justo antes de ir a dormir, sobre todo, si se trata de hidratar los talones, para poder estar tumbado y que se absorba bien todo el producto.

Remedios caseros

Al igual que existen cremas específicas para hidratar el cuerpo, incluso, partes concretas, como las manos o los pies, también se puede optar por remedios naturales y caseros. 

La rosa mosqueta, el aceite de oliva o el aloe vera son tres opciones naturales para hidratar los talones, las rodillas y los codos. 

Los zapatos, importante para los talones

Los talones secos y agrietados es un problema que se agrava durante el invierno, ya que las botas o botines suelen ser demasiado duros para los pies. Por ello, usar calzado cómodo y seguir la rutina de exfoliación para quitar las durezas e hidratar es fundamental. 

La alimentación, clave para la piel

La salud del cuerpo depende, en gran medida, de la alimentación. Por tanto, una dieta rica en vegetales frescos es perfecta para conseguir una piel sana y suave. La zanahoria, las nueces, el sésamo, los aceites y las leches vegetales contienen vitamina A, C y E, que no deben faltar en tu dieta.