El 90% de los hogares españoles conocen y utilizan los casi 22.000 puntos SIGRE para el reciclado de medicamentos

  • SIGRE cumple 20 años como un referente mundial en la gestión de residuos de medicamentos
  • Entre sus grandes hitos destacan haber evitado la emisión de 28.000 toneladas de CO2, haber reducido el peso de los envases de los medicamentos o que estos sean más reciclables.
SIGRE tiene casi 22 puntos de recogida distribuidos por toda España.
SIGRE tiene casi 22 puntos de recogida distribuidos por toda España.
alba garcia /Sigre
SIGRE tiene casi 22 puntos de recogida distribuidos por toda España.

Fruto de la colaboración entre la industria farmacéutica, las farmacias y las empresas de distribución farmacéutica, en 2001 se puso en marcha SIGRE, la entidad sin ánimo de lucro que se encarga de la gestión medioambiental de los envases y restos de medicamentos que se generan en los hogares. Dos décadas después, la entidad tiene mucho que celebrar, pues, además de conseguir que, según sus datos, el 90% de los hogares españoles conozcan y utilicen los casi 22 mil Puntos SIGRE repartidos por todo el territorio nacional, se ha convertido en todo un referente de gestión de residuos de medicamentos a nivel mundial.

Grandes hitos a lo largo de dos décadas

SIGRE surgió con dos objetivos: ecológico y sanitario. El primero de ellos, porque la recogida y el reciclaje de restos y envases de medicamentos evita que estos se tiren a la basura o por el desagüe, con el consecuente perjuicio para el medio ambiente, y sanitario porque fomenta la revisión periódica del botiquín para evitar la acumulación de medicamentos y la automedicación incontrolada. Ambos objetivos, alineados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 de Naciones Unidas, SIGRE los considera más que cumplidos, gracias a la colaboración de la industria farmacéutica, las farmacias y las distribuidoras, “SIGRE nació como un ejercicio de responsabilidad medioambiental del sector farmacéutico y es el mayor proyecto colaborativo emprendido para cerrar el ciclo de vida del medicamento haciendo suyos los principios de la economía circular. Hoy, gracias a las medidas de las compañías farmacéuticas, uno de cada tres envases de medicamentos es más sostenible y respetuoso con el medioambiente”, afirma Juan Carlos Mampaso, director general de SIGRE. Este buen hacer ha conseguido que, según calculan desde SIGRE se haya logrado evitar la tala de más de 165.000 árboles, se hayan ahorrado más de 350 millones de kW/hora, más de 300 millones de litros de agua y más de 55 millones de litros de petróleo. 

Además, gracias a sus planes de prevención y ecodiseño de los laboratorios han reducido en un 25% el peso de los envases de los medicamentos y su proceso de logística inversa de distribución farmacéutica ha evitado la emisión de de 1.400 toneladas anuales de CO2, 28 mil desde el inicio del sistema.

Un referente a nivel internacional

Desde 2006, la legislación sanitaria obliga a crear sistemas de gestión de residuos de medicamentos no usados o caducados, cinco años después de que el sector farmacéutico en su conjunto y de manera colaborativa creara por iniciativa propia SIGRE. Esto ha otorgado a la entidad una gran ventaja y la ha convertido, según Juan Carlos Mampaso, director general de SIGRE, “en un proyecto pionero e innovador que ha situado a España como referente internacional en el reciclado de los medicamentos y sus envases”. De hecho, SIGRE está considerado como el sistema de gestión de reciclado de medicamentos más completo de Europa con la colaboración de 340 laboratorios, 22.000 farmacias y 143 almacenes de distribución repartidos por todo el territorio nacional. Es precisamente esta coordinación la que ha permitido que en estos 20 años se hayan presentado 7 Planes Empresariales de Prevención de Envases y aplicado casi tres mil iniciativas de ecodiseño para reducir el peso de los envases farmacéuticos en más de un 25 % y facilitar el reciclado del 60% de los materiales de embalaje, “pese a la dificultad para introducir mejoras en unos productos tan delicados como los medicamentos, cada año se ponen en el mercado español más de 493 millones de unidades de fármacos con alguna mejora ambiental en su envase, lo que representa un 32% del total”, señala Humberto Arnés, presidente de SIGRE y director general de Farmaindustria. Estas iniciativas dan lugar a un modelo cada vez más eficiente “que permite cerrar ordenadamente el ciclo de vida del medicamento y consolida un modelo en el que la sostenibilidad y el beneficio del conjunto de la sociedad son los vectores que marcan los ámbitos de actuación de este sector”.

SIGRE es, además, un modelo a seguir en Latinoamérica, donde preside la Red Iberoamericana de Programas Posconsumo de Medicamentos para impulsar en el continente una iniciativa de similares características.

El importante papel de las distribuidoras y las farmacias

SIGRE no tendría el éxito de que goza hoy día sin la ayuda de los distribuidores y las farmacias. El papel de los primeros, en la recogida, transporte y custodia de los residuos de medicamentos, según afirma Matilde Sánchez, vicepresidenta de SIGRE y presidenta de la Federación de Distribuidores Farmacéuticos (FEDIFAR),“ha sido clave para el desarrollo y funcionamiento de un sistema que ha cambiado los hábitos de los ciudadanos sobre el reciclaje de este tipo de residuos”.

Pero no lo es menos el de las 22 mil farmacias en España que cuentan con un Punto SIGRE, pues son las que tienen contacto directo con los consumidores, responsables últimos de llevar los envases y residuos al punto más cercano a su domicilio. Y es que, la labor de sensibilización del sector farmacéutico ha calado en la población. Nueve de cada 10 hogares españoles conocen y usan el Punto SIGRE y saben que no es ecológico tirar los medicamentos a la basura, el 86% deposita los medicamentos caducados o que ya no sabe para qué sirven cuando hace la revisión del botiquín doméstico, y el 68% al finalizar un tratamiento si sobra parte de la medicación. 

Mostrar comentarios

Códigos Descuento