Para lograr un look difuminado comenzamos preparando la piel con la base preparadora, fluida y ligera, que fija el maquillaje y alisa e ilumina borrando inmediatamente arruguitas y defectos. Después, continuamos camuflando con el corrector perfecto, que aporta una gran cobertura de larga duración y oculta ojeras e imperfecciones sin marcar los rasgos.
Y, por último, alisamos la piel con el maquillaje serum alisante que perfecciona e ilumina, dejando la piel lisa y luminosa. Los polvos nacarados le darán el toque de luminosidad final a la cara.
Con la piel del rostro preparada
Pasamos a los ojos. Aplicamos el tono blanco con destellos en el párpado superior y, a continuación, la sombra fluida negra desde la zona exterior al interior del ojo.
El khol nos servirá para delinear la zona superior y para ello lo difuminaremos con un pincel biselado. Le damos el toque final a la mirada con la máscara amplitud para enmarcarla y con la máscara efecto lentejuela para conseguir un efecto fiesta.
Por último el velo de nácares nos ayudará a finalizar este maquillaje difuminado, aplicándolo en el pómulo y en el arco de la ceja.
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