El puente de Deusto se cierra al completo del 7 de julio al 15 de agosto por obras

El puente de Deusto está enfermo. Sus 73 años de vida pesan demasiado ya en su estructura metálica y en los mecanismos que le permiten plegarse, como antaño, ante el paso de las embarcaciones. Así que ha llegado la hora de meter en el taller por completo al simbólico puente, inaugurado en 1936.

La consecuencia más evidente es que deberá cerrarse al paso de la circulación durante cinco semanas seguidas. Dos de ellas, además, estará cerrado, incluso, al tránsito peatonal.

En concreto, el vial que conecta el barrio de Deusto con el Ensanche bilbaíno empezará la profunda reforma el próximo 24 de junio. Desde ese día y hasta el 7 de julio, sólo se mantendrán abiertos dos carriles de circulación, uno en cada sentido.

A partir del día de San Fermín y hasta el 15 de agosto –cinco semanas consecutivas– el puente dejará de ser entrada y salida al centro de Bilbao para los 34.000 vehículos que los cruzan, de media, cada día.

Además, las dos últimas semanas del mes de julio tampoco podrán pasar los peatones. Por ello, el tráfico (tanto particulares como autobuses) y los viandantes tendrán que recurrir al resto de puentes de su alrededor, tanto Euskalduna, La Salve o Ayuntamiento, como las pasarelas peatonales de Pedro Arrupe o Zu bi Zuri.

Tras la reparación, se habrá rerformado, en su interior, la maquinaria. Pero también estarán renovados, en su parte visible, el firme de la calzada, la barandilla o la iluminación.

"SU ESTABILIDAD ESTÁ ASEGURADA"

Tras el examen desarrollado el año pasado, los técnicos detectaron numerosas deficiencias en algunas de las piezas del puente de Deusto, sobre todo las que soportan los complejos sistemas de elevación.

De hecho, en las últimas semanas, se ha procedido a reparar de urgencia algunas zonas del puente, que generaban baches en la calzada. Pese a ello, según los técnicos, «la estabilidad del puente está asegurada».

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