Cuidado con las muelas del juicio, estos son los problemas que te pueden causar

Las muelas del juicio son las que más tardan en asomar. Si bien el resto de los dientes suelen aparecer todos como muy tarde a los 13 años, en el caso de las muelas del juicio estas no salen hasta los 18 o 22 años. Entre los odontólogos estas muelas se conocen también como terceros molares o cordales. Pero no  todas las personas las tienen.

La falta de espacio suele ser uno de los motivos por los que las muelas del juicio no llegan a salir, según afirma PROPDENTAL. Esto puede provocar que empiecen a salir torcidas, algo que se debe resolver lo antes posible. No obstante, hay problemas bastante complicados que pueden aparecer debido a las muelas del juicio y que conviene que sean atendidos por un dentista lo antes posible.

Las muelas del juicio pueden dañar a otros dientes

Las muelas del juicio son bastante grandes y es normal que no tengan el espacio suficiente para salir dado que ya están todos los dientes formados ocupando el lugar que les corresponde. Por eso, cuando salen lo que causan es un apiñamiento que puede provocar daños en los dientes más cercanos. 

Las posibilidades de que se produzca una infección aumentan y, en algunos casos, la ortodoncia o la extracción de las muelas del juicio es la mejor solución para resolver el problema. Así se evitará dañar al resto de dientes.

Es posible que aparezcan quistes

Como bien explica PROPDENTAL, "las muelas del juicio se forman en un saco dentro de la mandíbula (...) que puede llenarse de líquido formando un quiste". En el momento en el que esto sucede es fundamental acudir a un dentista para la extracción de las muelas del juicio lo antes posible. 

¿Por qué esto es tan importante? Porque estos quistes pueden afectar a las estructuras nerviosas provocando entumecimiento, cosquilleo o falta de sensibilidad en la zona. Pero, además, en caso de no extirparse a tiempo estos quistes pueden terminar derivando en un tumor benigno o maligno.

Los problemas de higiene no son fáciles de resolver

Las muelas del juicio están situadas en la parte posterior de la boca a la que es muy difícil acceder con el cepillo de dientes, el hilo dental o cualquier otro producto para limpiar la boca. Esto provoca que la higiene no sea todo lo efectiva y que se queden restos de comida que pueden terminar generando caries. 

¿Cómo escoger un buen dentista?

Este problema es todavía mayor si las muelas del juicio no han terminado por salir completamente. El resultado es la aparición de caries que afectan a estas muelas y también a los dientes cercanos.

Aumenta el riesgo de pericoronaritis

Debido a lo anterior, es muy posible que el problema de las muelas del juicio termine derivando en una pericoronaritis, o infección de las envías. La forma de detectarla es a través del dolor al masticar los alimentos, fiebre, mal aliento o encía inflamada justo donde se encuentra una de las muelas del juicio.

Las muelas del juicio pueden traer varios problemas para la salud de la boca y del resto de los dientes, por esta razón, es importante acudir al dentista para que verifique que todo está bien y pueda hacer un seguimiento adecuado sobre cómo evolucionan durante su salida. A veces, no aparecen problemas y exceptuando un apiñamiento de los dientes todo va bien. Pero, para asegurarse es mejor contar con la valoración, el seguimiento y la opinión de un profesional.