¿Helado de cava o cava helado? No está claro a qué categoría pertenece la última creación de Jordi Roca, que esta vez se ha aliado con Codorníu para crear unos originales polos de cava, disponibles tanto en versión blanca como rosada.
Presentados en un envase que recuerda a los míticos Calippo -¿siguen existiendo?-, la propuesta de Anna Rocks es algo más sofisticada porque, según explica Roca, se trata del recipiente perfecto para mantener las burbujas de este original polo y poder brindar con él como si se tratara de una copa de cava.
El proceso de elaboración incluye jarabe equilibrado con gelificantes para mantener la estructura del cava en congelación y hacer que mantenga la burbuja, sin duda la seña de identidad de estos helados.
Después se mezcla con el cava y se introduce en los envases, que son inmediatamete congelados a 40 grados bajo cero para estructurar unos cristales de hielo lo más pequeños y bien repartidos posible, ha detallado Jordi Roca, responsable junto a su mujer Alejandra Rivas de las heladerías Rocambolesc.
Un auténtico reto para uno de los mejores pasteleros del mundo, y también una nueva forma de consumir cava, han apuntado desde Codorníu, que recientemente ha presentado un nuevo cava rosado pensado para tomar con hielos (Anna Ice Edition), y que se suma al cava blanco original (Anna Ice) lanzado al mercado hace unos años.
El polo Anna Rocks está a la venta en las heladerías Rocambolesc de Girona, Barcelona, Madrid y Alicante con un precio de 3,5 euros.
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