Sevilla

El empresario Jose María Ruiz-Mateos: "No iré a Sevilla, ni compareceré ante ningún juez"

El patriarca de Nueva Rumasa, José María Ruiz Mateos.
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El empresario José María Ruiz-Mateos ha dicho que no acudirá a Sevilla donde está citado por la juez de los ERE para declarar como imputado por presuntamente pagar medio millón de euros al "conseguidor" Juan Lanzas y ordenar incluir "intrusos" en empresas del grupo.

"No iré a Sevilla a declarar porque no creo en la Justicia y, si la hubiera, ni en su honorabilidad", ha señalado el empresario en un comunicado en respuesta a la citación de la juez Mercedes Alaya.

Alaya ha citado a Ruiz-Mateos y a su hijo Zoilo, después de tomar declaración el pasado 31 de enero a sus hijos Javier, responsable de coordinar los pagos en Nueva Rumasa, y Pablo, encargado de la división hotelera.

Declaraciones del acusado

"Que no me esperen en Sevilla que llevo esperando treinta años a ver un resquicio de mínima honradez que no hubo nunca. Así me ajusticien en plaza pública o me lleven a la picota del descrédito y la trampa permanente, haga lo que haga, me quedo en esta casa que no es mía esperando que me detengan", ha señalado Ruiz-Mateos.

En su declaración, los hijos del empresario Javier y Pablo dijeron que su padre era quien decidió introducir en el ERE del Hotel Cervantes de Torremolinos (Málaga) a dos presuntos "intrusos" que nunca trabajaron en él: José Antonio Cuevas y Claudio Andrés Sendino, procedentes de otras dos empresas del grupo, Autos Marbesol y Viajes Marbesol, donde el primero de ellos había llegado a trabajar veinte años.

La jueza sostiene que los Ruiz-Mateos pagaron al "conseguidor" Lanzas 600.000 euros por cada uno de los cinco ERE del grupo en Andalucía, en billetes de 500 euros y en "dinero B", acusación que los imputados atribuyen a la "enemistad manifiesta" del autor de esas afirmaciones, el exabogado del grupo Joaquín Yvancos.

Por el contrario, Javier Ruiz-Mateos dijo en su declaración que Lanzas pudo cobrar medio millón de euros en pagos de 20.000 o 25.000 euros, que se hacían "cuando su padre lo ordenaba".