Internacional

Londres teme que el conflicto con España por Gibraltar acabe como el de las Malvinas

Numerosos vehículos intentan acceder a Gibraltar, cuyo acceso se ve afectado por largas colas de vehículos.
EFE

El secretario de Estado para Europa del Reino Unido, David Lidington, ha advertido de que la actual tensión entre España y Gibraltar podría "enturbiar" las relaciones bilaterales con su país y ha considerado que sería "una tragedia". Lidington ha puesto de manifiesto el temor de Londres de que este contencioso acabe como el de Malvinas con Argentina, que ha afectado seriamente a la relación bilateral.

"Considero que es importante que no haya malentendidos respecto a la seriedad de nuestro compromiso con Gibraltar y al derecho democrático de los gibraltareños de seguir siendo británicos", ha manifestado Lidington en una entrevista al Financial Times.

"El riesgo ahora es que esto se vuelva como [el contencioso de] las Falklands —nombre empleado por Reino Unido para las Malvinas—, donde no podamos hablar con ellos [los españoles] sobre la economía o la seguridad o cualquier otra cosa sin que Gibraltar sea el principal tema de discusión", ha señalado.

El Financial Times subraya que esta es la primera vez que un miembro del Gobierno de David Cameron reconoce públicamente las serias consecuencias que podría tener a largo plazo la disputa generada por el lanzamiento al mar por parte del Ejecutivo gibraltareño de bloques de hormigón.

Misión de la CE

La Comisión Europea tiene previsto enviar a lo largo de este mes una misión a la zona. Inicialmente, se decidió que esta misión de observación investigaría las colas de las que se quejaba Gibraltar pero posteriormente se amplió su ámbito de actuación al contrabando que denuncia el Gobierno español.

"La Comisión debe enviar un equipo allí en septiembre así que espero que sea cuestión de días o de unas pocas semanas", ha afirmado Lidington, quien ha subrayado que la Comisión Europea es "la guardiana de los tratados y los gibraltareños son de la UE".

El responsable británico ha admitido que el Peñón "no forma parte del mercado único de bienes, así que España tiene derecho a realizar controles, pero esos controles deberían ser proporcionados y necesarios y no estar políticamente motivados".