Gastronomía de Ávila, donde las carnes son la estrella

La ternera de Ávila tiene Indicación Geográfica Protegida.
WIKIPEDIA/Xemenendura

En tierras de Castilla la gastronomía es sobria, como en Ávila. Y sin embargo, por la calidad de su materia prima, es el tercer gran patrimonio de provincia, junto al de su imponente naturaleza y su valiosa herencia arquitectónica y cultural.

A la hora de hacer mesa y mantel en Ávila hay que tener claro que estamos ante todo en tierra de excelentes carnes. Las carnes al horno se pueden encontrar en toda la geografía de Castilla, pero el punto que alcanzan las que se elaboran en Ávila es dificilísimo de igualar. Son muy populares el cochinillo o tostón asado y el cabrito, así como la carne de caza y el cordero.

Si otras provincias de Castilla y León, como Segovia o Burgos, pueden ser señeras en cuanto al lechazo o el cochinillo, en Ávila la estrella es sin duda alguna la ternera, con‎ Indicación Geográfica Protegida (IGP), de la que se obtiene un exquisito chuletón, de textura suave y color rosado.

Claro que como en cualquier rincón de España, el cerdo tiene su lugar destacado, especialmente cuando llega la matanza. En tierra abulenses se elaboran los lomos adobados, los chorizos de olla y las sabrosísimas morcillas.

La carne, ya se ha dicho, es la gran baza, pero Ávila también disfruta de excelentes verduras y legumbres. De su mano se elaboran numerosos guisos y platos de cuchara como el repollo al ajo arriero, los pimientos rellenos, el cocido Morañego o las populares patatas revolconas –cocidas, machacadas y aderezadas con pimentón y torreznillos–.

Y de postre muchos de los dulces vinculados desde hace siglos a sus congregaciones religiosas. El más popular de sus postres son las yemas de Santa Teresa, pero además están los amarguillos, los huesitos, los empiñonados y multitud de pastas.

Fuente: Guía Repsol. Rutas, mapas, restaurantes … ¡Planifica con nosotros tu viaje!