La llegada del verano nos recuerda que el sol es un gran enemigo de la piel. También lo han hecho las autoridades norteamericanas al endurecer el etiquetado y los tests de protectores solares.
El pasado lunes se celebró el Día Europeo de la Prevención del Cáncer de Piel. A la luz de esta celebración, un dato: el cáncer de piel es el tumor más frecuente en los jóvenes de entre 25 y 29 años y el segundo en prevalencia en los que tienen entre 15 y 24 años.
Además, en los últimos 30 años ha incrementado su incidencia a nivel mundial y en todos los grupos de edad de forma aplastante, con una progresión que alcanza cifras de entre el 3 y el 8%, dependiendo de las zonas geográficas y las características de la población.
Piel clara y muchas horas de sol
El director del Servicio de Cáncer de Piel del Hospital USP San Camilo, Miguel Sánchez Viera, señala que, aunque España no es el país con mayores cifras de incidencia, si que se sitúa "en el segundo grupo de países con mayores tasas de prevalencia junto con algunos países mediterráneos y del sur de Europa y algunos estados del norte de América".
Esto se debe a la "gran cantidad de horas solares" que se registran en la península y al tipo de piel de la población, que en muchos casos es clara y, por tanto, "con menor capacidad de pigmentación y capacidad de protección".
Sin embargo y a pesar de que las cifras de incidencia son alarmantes, la tasa de mortalidad ha descendido un 30%, debido, en "gran medida", al diagnóstico precoz de la patología. Y es que cuando el melanoma, que es el tumor cutáneo "más agresivo", se diagnóstica en los estadíos iniciales la tasa de curación es del 95%.
Los tres pilares
La prevención, según el doctor Viera, pasa por tres pilares fundamentales: la fotoprotección, la autoexploración y la visita anual al dermatólogo.
- Siempre que vayamos a estar expuestos al sol debemos protegernos: protector solar y sombrero o gorra siempre que se salga a la calle durante un tiempo prolongado o se trabaje al aire libre (una de las zonas con mayor predisposición al desarrollo de tumor cutáneo es el pabellón auricular).
- Ponerse suficiente crema protectora. Debido a la sudoración, se evapora. Se aconseja ponerse protector cada 2 o 3 horas y tras cada baño.
- Es recomendable usar un protector con FPS 50 en pieles claras y con FPS 30 en pieles morenas.
- Hay que acudir al dermatólogo una vez al año y, en caso de tipos de pieles más sensibles (subtipos 1 y 2), de haber padecido cáncer de piel o de tener antecedentes familiares del mismo, dos veces al año.
- Autoexploración. Se debe acudir al especialista cuando aparezcan manchas que persisten y/o crecen, y cuando las que se tenían cambien de color o forma.
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