En España, según uno de los últimos informes sobre el uso de 'jeans', elaborado por la web de venta flash Venteprivee.com, más de la mitad de los ciudadanos no se ve bien con los pantalones vaqueros, aunque los usa prácticamente todos los días a modo uniforme. Este dato tan revelador llama la atención, ya que este mismo estudio afirma que en el armario femenino pueden llegar a convivir hasta cinco modelos diferentes.
¿No nos gusta como nos queda el vaquero, pero es el pantalón en el que más invertimos? La realidad es que existe como una 'obsesión' extendida entre mujeres de todo el mundo, que consiste en encontrar el vaquero perfecto, ese que te sienta como un guante y que querrás llevarlo 24/7.
Las mujeres de 50 lo han encontrado y lo combinan con botas altas: el 'jean' pitillo. Te damos todas sus claves.
Pitillos vaqueros con botas, el dúo ganador a los 50
La relación de la industria con los pantalones pitillo está basada en esa especie de amor-odio que, aunque las que más saben de moda llega un punto que los ignoran, siempre vuelven. Y cuando dejan de estar presentes en las colecciones, las firmas crean otras opciones inspiradas en el modelo amado en los 90, como los leggings.
Aunque la vuelta del pitillo se remonta al pasado año, este 2024 sigue siendo el protagonismo del armario femenino gracias, entre otros factores, a su facilidad de combinación. Este vaquero es uno de los modelos que mejor sienta a todas las siluetas por su poder de estilizar. Además, te contamos qué más ventajas tiene sobre el resto de pantalones 'denim':
- Su corte. La estética ajustada define la figura y consigue ese efecto estilizado tan favorecedor.
- Su versatilidad. Es un pantalón que combina no solo con cualquier prenda exterior y parte de arriba, sino que puedes combinarlo con todo tipo de calzado: desde botas altas o botines hasta el zapato plano, el tipo salón, las sandalias o las deportivas. Todo depende del resultado final que quieras conseguir, si una estética más casual o un look más sofisticado y femenino.
- Su condición de conseguir que parezcas más alta, siempre y cuando elijas un modelo de tiro alto y corte al tobillo.
Aunque la condición, sin duda, de la temporada, y más aún, si ya has cumplido los cincuenta años, es llevar tus pitillos con botas altas, de estética mosquetera. Un dúo que destaca por su versatilidad, ya que puedes combinarlo con todo tipo de prendas.
Este tipo de botas consigue aportar equilibrio a la figura y son aptas tanto para ocasiones casuales como más formales si las llevamos con los pitillo. En este caso, simplemente debemos llevar los 'jeans' metidos por dentro de la bota, a poder ser ajustados para crear un efecto visual de alargar la pierna.
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