El deporte femenino como espectáculo, cómo industria, como generador de negocio (no hablamos de emociones, esas siempre han estado ahí) tiene un recorrido mucho más corto que el masculino, sin entrar en deportes o casos concretos (gimnasia, tenis, patinaje…).
Cuando hablamos de igualdad en el deporte el concepto es en sí una utopía y quien diga lo contrario es que no lo ha pensado.
En el I Congreso Internacional Mujer y deporte organizado por Women’s Sports Institute, Carmen León médico deportiva de la selección española de rugby y colaboradora con las federaciones de baloncesto y atletismo, sobre este tema dijo verdades como puños, que aunque parezca increíble, hay que seguir diciendo: "Los hombres y las mujeres no somos iguales. Una cosa es que tengamos los mismos derechos, pero no somos iguales. Somos complementarios, no suplementarios. Tenemos diferencias biológicas brutales. En el aspecto psicológico somos completamente diferentes. Las mujeres tenemos otra mentalidad". Y esa es la base que sostiene la belleza del deporte, las diferentes capacidades y aptitudes de cada atleta, de cada deportista, independientemente de su sexo. Los retos, los récords, el afán de superación y por supuesto la competitividad bien entendida.
Cuando hablamos de igualdad en el deporte el concepto es en sí una utopía y quien diga lo contrario es que no lo ha pensado
¿Cuántas veces hemos oído que las deportistas están peor pagadas que ellos porque no generan los mismos ingresos y el negocio es menor? (mansplaining de manual) ¿Cuántas veces nos han hablado (mansplaining nuevamente) de lo que se paga por derechos de retransmisión en competiciones masculinas Vs femeninas? No nos hagan las cuentas señores, no hablamos solo de números, hablamos de resultados deportivos.
Pero también hablamos de avances, de títulos, de hacer marca (España) en el resto del mundo, de apoyar al deporte de base, de ilusionar a las niñas, de trabajar para que se reduzca el alto porcentaje de abandono de deportistas en la adolescencia, de, como dice Alejandra Domínguez, directora de Women’s Sports Institute: "apoyar y fortalecer la base y defender la industria" porque así y solo así ilusionaremos también a grandes y pequeñas empresas, a federaciones, a ligas y a clubes, sí también a clubes. Para que el campo de juego sea el mismo en ambas categorías, para que las condiciones de entrenamiento sean similares, y la inversión en infraestructura y equipación sea equiparable y sobre todo DIGNA.
Para que todo esto ocurra es fundamental que el deporte masculino apoye al femenino para que solo se hable de deporte, sin género, pero, por encima de todo es importante que el deporte femenino esté apoyado por el deporte femenino y que comuniquemos desde la ilusión y no desde la frustración. Hay que reivindicar sí, pero hay que trabajar para que nuestras marcas (ahora sí, las del cronómetro y las del marcador) hablen por nosotras cuando nosotras hayamos dicho todo lo que tengamos que decir.
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