A Paloma Real, directora general de Mastercard España le gusta puntualizar un aspecto: "Somos una empresa tecnológica y no financiera".
Con esa premisa bien clara ya podemos inmiscuirnos en la trayectoria de esta madrileña, nacida un mes de octubre de 1975. Su infancia y adolescencia caminaron por senderos apacibles, sin aspavientos: "Creo que tuve una vida muy normal, fui una niña muy feliz en ambos momentos". Sin ningún antepasado enfrascado en números y ecuaciones, se licenció en ingeniería de Telecomunicaciones por la Universidad Politécnica de Madrid: "Fui la primera de mi familia en elegir una carrera de ciencias, por lo tanto no tenía ningún referente familiar que me hubiera insuflado el ‘gusanillo’ ni de la ingeniería ni de las materias que ahora llamamos STEM".
Tras finalizar los estudios dedicó gran parte de su carrera profesional en diseñar y lanzar productos financieros y de pago para móviles, como hizo en France Telecom, Amena y Grupo Auna, y "también participé en el lanzamiento y desarrollo de la iniciativa mundial pionera en pago móvil, Mobipay. Enfrentando la dirección de diferentes proyectos innovadores implantados en colaboración con entidades como Banesto, Santander y Bankinter, puse en marcha los primeros pilotos de NFC de pagos y transporte en España". En 2014 se incorporó a Mastercard como directora de Desarrollo de negocio e Innovación Iberia y, tres años más tarde, ascendió a directora general en España.
¿Qué es Mastercard?
La explicación más formal, que puede sorprender a muchos, es que es una empresa tecnológica y no financiera, como muchas personas piensan, que pertenece a la industria global de los pagos. Pero somos mucho más que tarjetas que, por cierto, nosotros no las emitimos, lo hacen las entidades financieras. Somos la tecnología que hace que el pago, ya sea con tarjeta, con el móvil o de cualquier otra forma que nos pida el consumidor, sea rápido, sencillo y seguro. Y además, somos una empresa de servicios de valor añadido para nuestros clientes: bancos, entidades financieras, comercios, gobiernos y muchos más. Servicios en materias como ciberseguridad, datos o identidad digital, entre otros.
En vuestra web corporativa tenéis epígrafes que hablan de diversidad e inclusión…
Sabemos que trabajar con personas de distintos géneros, orígenes, formas de pensar, etc, enriquecen los equipos y nos hacen más innovadores. Yo misma me aseguro de que en las entrevistas para cubrir nuevos puestos haya paridad de hombres y mujeres.
Y también nombráis la palabra sostenibilidad…
Es clave y tenemos diferentes iniciativas como 'Priceless Planet Coalition', para reforestar los bosques en todo el mundo, incluida España. Impulsamos la fabricación de tarjetas con materiales sostenibles y tenemos herramientas para calcular huella de carbono generada con las compras y aportamos ideas de cómo reducirla, por mencionarte algunos ejemplos. Hace un mes lanzamos en España una campaña de donación para reforestar bosques junto a Areas y Worldcoo en la que involucramos a los clientes finales. Estuvimos limpiando un río hace unos meses, y nuestros eventos son 100% sostenibles, desde los materiales y proveedores que contratamos hasta los productos que servimos, que son locales, frescos y sostenibles.
¿Cómo ejerces tu responsabilidad? O, dando una vuelta a lo anterior: ¿cuáles dirías que son las cualidades de una buena directora general?
Cada profesional tiene su forma particular de dirigir y trabajar. No obstante, creo que una líder debe ser fuerte y efectiva. Esto implica establecer una visión clara, tomar decisiones estratégicas, liderar equipos con empatía y eficiencia, y buscar constantemente la innovación y el crecimiento en la empresa. En mi caso, ejerzo mi responsabilidad enfocándome en liderar con visión, impulsar la innovación y trabajar en estrecha colaboración con nuestro equipo para alcanzar nuestros objetivos estratégicos.
¿Eres ambiciosa? ¿Perfeccionista?
Más bien diría que soy una apasionada de mi trabajo, creo en lo que hacemos desde Mastercard y quiero que la compañía y mi equipo den siempre su mejor versión, interna y externamente.
¿Hemos avanzado en el acceso de la mujer a puestos de responsabilidad?
Creo que en España se ha progresado mucho en cuanto al balance de hombres y mujeres en las compañías, aunque aún queda mucho por hacer para que lleguemos a ocupar más puestos en las cúpulas directivas. En Mastercard un 49% de los empleados son mujeres, pero solamente un tercio ocupan puestos de alta dirección. Tenemos el reto de salvar esa diferencia para que sea más igualitario.
Cada profesional tiene su forma particular de dirigir y trabajar. No obstante, creo que una líder debe ser fuerte y efectiva
Ideaste los Premios de la Fundación Real Academia de Ciencias de España al Joven Talento Científico Femenino, ¿por qué?
Es una iniciativa de la que me siento especialmente orgullosa porque ha funcionado muy bien y ha permitido darles visibilidad a mujeres muy cualificadas en el ámbito de las ciencias que, de otra forma, nadie conocería y que necesitan apoyos. Yo estudié una carrera en la que predominaban los hombres en clase y había pocos referentes femeninos. Creo firmemente en la importancia de empoderar a las mujeres en la ciencia y ofrecerles oportunidades para destacar en sus carreras. Fue un proyecto que me apasionó desde el principio y que espero que continúe inspirando a jóvenes científicas en su desarrollo profesional.
Imagino que el proyecto continúa…
De hecho acabamos de arrancar nuestra IV edición con la apertura de presentación de candidaturas y que terminarán el 31 de octubre, por lo que animo a todas a aquellas mujeres científicas de hasta 45 años, que estén leyendo esta entrevista, que se presenten para poder seguir premiando y visibilizando el talento científico femenino. Además, dando nombre a estas mujeres, creamos un espejo en el que las niñas pueden verse reflejadas de cara al futuro.
¿Cómo repones las energías?
El descanso no solo es necesario, es esencial para afrontar el día a día de mi rutina. El ejercicio, entre ellos el yoga, me permite tanto desconectar como activar mi cuerpo en la mañana para iniciar la jornada. Además, leer, pintar o pasear por Madrid son algunas de mis actividades favoritas. Hacen que desconecte y recargue las pilas.
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