¿Cómo cuidar tus piernas si tu trabajo te obliga a pasar demasiado tiempo de pie?

Un masaje diario después de la jornada laboral puede ayudar a la salud de las piernas.
Un masaje diario después de la jornada laboral puede ayudar a mejorar la salud de las piernas.
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Un masaje diario después de la jornada laboral puede ayudar a la salud de las piernas.

Hay profesiones en las que debes pasar mucho tiempo de pie. Excepto a la hora de comer, es posible que en esas ocho horas que le dedicas al trabajo no puedas sentarte, sobre todo, si trabajas de cara al público y hay muchos clientes. Un ejemplo con el que te puedes sentir identificada es en el caso de que seas dependienta de una tienda de ropa, responsable de la carnicería de un supermercado o centro comercial comercial. ¿Cómo puedes cuidar tus piernas?

Aunque no te lo parezca, tus piernas sufren. Por eso, cuando te sientas por primera vez en toda la jornada laboral notas una sensación de fatiga de la que no eras consciente. Pero, puede haber otro tipo de consecuencias. Estar de pie durante demasiado tiempo favorece la aparición de venas varicosas, según afirman en el artículo publicado por la agencia de comunicación científica Elsevier: Venas Varicosas

En otro de sus artículos, Cuidado de las piernas y los pies, indican que cuando se tiene una profesión en la que hay que estar mucho tiempo de pie puede aparecer la hinchazón, así como la sensación de pesadez. Por ello, es importante que sepas cómo cuidar tus piernas cuando tu jornada laboral llega a su fin. Pues tu trabajo no lo puedes cambiar, pero sí está en tus manos paliar y prevenir las consecuencias para tus piernas.

Realizar estiramientos durante la jornada laboral

Siempre hay momentos en los que el flujo de clientes es menor y puedes tomarte unos minutos para permitir que tus piernas descansen. Aunque la tentación será sentarte, los estiramientos ayudan a relajar los músculos, liberando la tensión que han ido acumulando a lo largo de las horas. Algunos ejemplos pueden ser los siguientes:

  • Estiramiento de cuádriceps: lleva uno de tus talones al glúteo y mantén durante unos segundos. Notarás cómo el estiramiento relaja tu musculatura. Hazlo varias veces a lo largo de tu jornada.
  • Estiramiento de isquiotibiales y gemelos:  aprovecha que estás recogiendo algo en el almacén o que te tienes que agachar, para flexionar una pierna, mientras mantienes la otra estirada hacia delante. Intenta tocar la punta del pie, aunque si no llegas, no te preocupes.

Si quieres, puedes adaptar estos ejercicios para realizarlos cuando estés sentada en una silla. De esta forma, mientras descansas, estirarás los músculos que se sentirán mucho más agradecidos cuando finalices tu jornada en el trabajo. Te aseguramos que te sentirás mejor.

Presta atención al calzado

En el caso de que utilices tacones en tu trabajo, deberías vigilar cuál es su altura. Si últimamente has notado mucha tensión en tus gemelos, esto puede deberse a que superas los 5 centímetros que, desde el Consejo General de Podólogos de España, sería la altura máxima recomendada en el trabajo. El malestar en las piernas puede aumentar.

Asimismo, aunque optes por un calzado plano, es importante que este tenga una suela que amortigüe bien los impactos. Unas bailarinas, por ejemplo, no ofrecerían la protección adecuada a la planta del pie, lo que se traduciría en dolor y, posteriormente, en una tensión acumulada que también afectaría a las piernas. Así que, ten esto presente.

Regálate un buen masaje al llegar a casa

Existen productos cosméticos, como geles para piernas cansadas, que están específicamente diseñados para mujeres que, como tú, pasan demasiadas horas de pie en su trabajo. Por lo tanto, aunque estés agotada, mientras te relajas en tu sofá, no dudes en darte un buen masaje. Te aseguramos que tus piernas lo agradecerán al día siguiente.

Asimismo, las medias de compresión pueden convertirte en tus grandes aliadas. ¿Sabías que favorecen la circulación de la sangre, previenen las varices y pueden ayudarte si trabajas muchas horas de pie? Puedes pedir consejo a tu médico o fisioterapeuta si tienes dudas sobre su conveniencia al usarlas. No obstante, esperamos que los consejos anteriores te ayuden.

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