El aire acondicionado del coche no enfría: cómo arreglarlo y cada cuánto revisarlo

El sistema de aire acondicionado del coche se debe revisar siempre que haya o se detecte algún problema, señalan los expertos de Norauto. Pero no siempre conviene esperar a que haya un fallo, que nos puede pillar en medio de plena ola de calor, para echarle un vistazo a este sistema. 

La revisión del aire acondicionado está dentro de la preparación del vehículo para el verano y se contempla como un paso más del mantenimiento preventivo de un vehículo, que puede ayudar al conductor a ahorrar cientos de euros en averías inesperadas o provocadas por una falta de atención. 

El gas y los filtros

En lo que se refiere a recargar el gas, lo ideal es hacerlo cada 2 años y si es necesario hacerlo con más frecuencia, deberemos intuir que hay algún fallo en el sistema y llevarlo a revisar, preferiblemente a un taller donde probablemente sepan encontrar mucho más rápido la avería. 

Qué hacer cuando el aire del coche no enfría y tiene gas

Si el aire no enfría, un problema puede ser precisamente la falta de carga o una fuga. Para ello, habrá que llevar el coche al taller donde detecten el escape (a veces es necesario un sistema de infrarrojos) y carguen el gas necesario. Habrá que tener en cuenta que si el vehículo es anterior a 2017, seguramente será necesario utilizar el gas tradicional R134A y si es posterior, se debe utilizar el gas R1234YF, siempre de manera orientativa y atendiendo a las instrucciones del fabricante. Este procedimiento cuesta entre 60 y 65 euros. 

También es posible que el filtro del aire esté excesivamente sucio y por ello no enfríe. Este fallo podría ir incluso acompañado de un mal olor, lo que nos daría una pista de qué componente falla. El filtro del aire debe revisarse cada seis meses, con los cambios de estación y limpiarse. Se se observan rotos, habrá que sustituirlos.

Otras averías inesperadas

Cuánto cuesta arreglar el climatizador de un coche

Si no existe ninguna fuga, el filtro está limpio y el aire sigue calentando o sin funcionar, pude haber un problema en el compresor que transforma este gas refrigerante en líquido. Ahí, la reparación muchas veces pasa por sustituir esta pieza, lo que puede llegar a costar hasta 1.000 euros. 

Otros problemas que también pueden provocar una falta de funcionamiento del aire acondicionado del coche, más allá de lo que revisemos de manera anual, son fallos en los fusibles o algún tipo de cortocircuito o averías en el motor eléctrico que mezcla el aire frío con el caliente. Este tipo de desperfectos no dependen de un mantenimiento periódico regular.