Land Rover Range Rover Sport Supercharged

Para poder arrancar, el motor del Land Rover utiliza gasolina como combustible en un depósito de 105 L. En carretera su consumo medio es de 12,821 l gastados por cada 100 kilómetros realizados, una cifra muy elevada solo para aquellos conductores a los que no les importa el consumo de su vehículo y dan más prioridad a otras características.

Además, este coche alberga un poderoso motor de gasolina con una fuerza disponible de 510 CV, situado muy por encima de la media de automóviles,, con una aceleración de 0 a 100 Km/h en 5,3 segundos. Por otra parte, el modelo dispone de 8 cilindros en V y una cilindrada de 4.999 cm³.

Su sistema de conducción es de transmisión automático, lo que significa grandes ventajas para el piloto. Desde una conducción más práctica, cómoda y deportiva, hasta permitirnos disfrutar de una de las maneras más seguras de conducir de hoy en día: al no depender de la palanca y los pedales, podemos enfocar nuestra atención en la ruta. Además, el uso de un coche automático puede verse reflejado positivamente en el consumo de combustible, ya que los cambios de marcha se realizan, entre otras razones, pensando en el rendimiento.